Sus familiares hacen un llamado a las autoridades para que esclarezcan el caso el cual quedó congelado en el tiempo
José Alejandro Ramírez J
Alejandroperiodista857@gmail.com
Ya han pasado tres meses y quince días desde que sus familiares vieron por última vez a Leiber, un bebé que sería la alegría de dos familias a partir del 31 del enero cuando Mari Graciela Solano Berra dio a luz en las instalaciones del hospital Ruiz y Páez; pero que en menos de 24 horas esas risas y alegrías se convirtieron en dolor y tristeza por el robo del bebé de las manos de una mujer despiadada que tiene en vilo a sus padres.
Durante este tiempo los allegados del bebé han mantenido varias campañas a través de las redes sociales para dar a conocer fotos del recién nacido en ese momento y pedir a las autoridades que esclarezcan el caso, ya que a su juicio quedó archivado y no ha sido resuelto.
Tanto familiares como amigos de los jóvenes padres han condenado que durante este tiempo, no haya avances en la investigación; aún cuando se tiene detenida a una supuesta sospechosa, quien se encuentra recluida en el retén de Agua Salada y según presenta problemas mentales.
Los hechos
Recordemos que los hechos se dieron el pasado 31 de enero cuando Mari Graciela Solano Berra acudió al nosocomio local en compañía de Cleydemar Blanco y sus familiares, ya que tenía los dolores de parto.
Tras llegar al nosocomio local y dar a luz, fue referida a una habitación, donde permaneció por espacio de varias horas, pero en ese momento fue notificada que su bebé había nació un poco bajo de peso y estaba al cuidado del equipo de salud de ese centro hospitalario.
Sin embargo cuando se encontraba dando pecho al recién nacido se percataron que el mismo no respiraba bien por lo que procedieron llevarlo al área de retén y allí es cuando aparece la mujer, quien toma el bebé alegando que era enfermera y que tenía que llevarlo a otra área del hospital.
Al pasar los minutos los padres se preocuparon y al dirigirse al sitio para solicitar información se percataron que la mujer, quien se hacía pasar por supuesta enfermera había robado el bebé, por lo que desde ese día empezó su calvario.
Una alegría que no duró mucho
La familia del bebé raptado brincó de alegría a mediados de marzo, cuando se enteraron que una comisión de la Policía Municipal de Heres había capturado a una supuesta sospechosa, esto debido luego de que las autoridades del Cicpc publicara el retrato hablado de la raptara.
Una vez que la mujer fue detenida y llevada a la sede de la PM para después ser remitida al Cicpc, varias personas la reconocieron.
Se dijo que pese a que la fémina en un principio reconoció haberse llevado a la criatura, después alegó tener problemas mentales, por lo que el caso ha tomado otros giros.
Los familiares del bebé claman a las autoridades que puedan resolver el caso y de esta manera devolver a la criatura con sus seres queridos, quienes desde el pasado 31 de enero no tienen ni un minuto de paz, de solo pensar si estará bien el bebé, quién lo tendrá y si algún día volverá con sus allegados.
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