“Solo un enfermo mental sería capaz de inventar o de creerse las mentiras del narcogobierno venezolano, sin que exista ninguna prueba”, asegura Wilson Castro, dirigente opositor que se encuentra exiliado en Colombia y a quien el ministro de comunicaciones de Venezuela, Jorge Rodríguez, acusó de estar relacionado en conspiraciones contra la presidencia.

Añade que el dirigente chavista es “la expresión de la maldad y la demencia de quienes gobiernan en Venezuela, con el único fin de seguir acumulando poder y riquezas sin importar lo que sufre el pueblo”.

Castro aclara que a pesar de ser un civilista, le encantaría que existiera algo de verdad en alguno de los cientos de supuestos planes de golpes de Estado anunciados por el expresidente Hugo Chávez o por Nicolás Maduro.

Indica que no puede tener credibilidad alguna quienes sistemáticamente usan la mentira “sin tener información, ni pruebas” como una herramienta de gobierno, con el único fin de perpetuarse en el poder, a costa del sufrimiento de los venezolanos.

“No hay nada peor que lo que el chavismo le hizo a Venezuela a lo largo de los últimos veinte años, pero estoy seguro que saldremos de ellos y que la democracia volverá tan pronto la narcotiranía abandone Miraflores”.

Sistemáticos

El dirigente opositor del estado Bolívar recuerda que no es la primera vez que el chavismo lo acusa de algún delito: “Durante algún tiempo nos culparon de todo lo que sucedía al sur del país, a pesar de que ellos son los únicos responsables de la catástrofe que vive Venezuela”.

Primero fue el presidente Maduro, quien en cadena nacional de radio y televisión afirmó que Wilson Castro preparaba un apagón general con la colaboración del gobierno de los Estados Unidos y luego lo señalaron como responsable de una banda organizada para saquear las escuelas de Guayana.

En 2015 Maduro, Diosdado Cabello y otros dirigentes del chavismo utilizaron esta misma estrategia para responsabilizar a Castro por los saqueos que se produjeron en San Félix, sin presentar ninguna prueba.

“Igual que esta vez, siempre me acusaron de cosas que son responsabilidad de ellos, porque fue el chavismo el que apagó la antigua Edelca, ahora Corpoelec, iniciando la debacle eléctrica en el país, fueron ellos los que saquearon la capacidad productiva de la nación y fueron ellos los que destartalaron todas las instituciones educativas del país”.

“Vamos bien”

Castro detalla que todas las medidas desesperadas del Gobierno no son más que “patadas de ahogado” y el efecto de la presión que hace el pueblo en la calle, junto a las autoridades internacionales que se han sumado a pedir el retorno de la democracia en Venezuela.

Pide a los ciudadanos seguir confiando en los liderazgos de la oposición y en el trabajo que se hace desde hace varios años para sacar a Maduro y sus enchufados del poder.

“Este es un camino largo, pero ya estamos llegando al final, tenemos que ser persistentes en todos los frentes, porque la libertad y la Venezuela que soñamos están muy cerca”.

 

Prensa Wilson Castro