La grúa Clyde fue como un símbolo de nuestra ciudad, parte integrante del conjunto de instalaciones que conformaron el muelle de Ciudad Bolívar, obra realizada entre los años 1941-46 por la firma Raymond Concret que la construyó en el lapso de dos años, trabajando las 24 horas del día. Aunque la obra se hizo a conciencia para resistir el embate de los elementos, lamentablemente fue abandonada y la corrosión implacable hizo su labor destructiva.

La tensión de las fuertes guayas de la grúa, colocaron en tierra firme las miles de toneladas de mercancía que traían barcos de diferentes banderas cuyos tripulantes solían acudir al Bar Cyrnos propiedad de Don Félix Valery inicialmente y luego del popular Pablo García. Allí consumían grandes cantidades de la cerveza angostureña Pilsen Princesa a la que catalogaban como excelente, de igual manera las famosas parrillas de “Churruncho Birriel.

La capacidad de la Clyde era de 35 toneladas y en la última oportunidad cuando fue utilizada sólo aceptaba 20 con su brazo en posición vertical. Hace ya varios años, fallecieron los señores Miguel Contreras y Fernando Reyes quienes eran las únicas personas que conocían el funcionamiento de esta máquina por haber trabajado en ella desde el día en que la armaron.

Parte importante del conjunto son los ascensores trabados por la herrumbre, el muelle flotante y el Puente que lo une con los depósitos y por último el techo de material refractario que se vino al suelo.

La creación de la unidad militar mencionada y el aprovechamiento de diversas áreas como el viejo resguardo evitaron la destrucción total de una edificación de alto valor histórico y sentimental para los bolívarense aunque el floreciente comercio que vivió nuestra ciudad en el pasado y la esperanza de ver atracando los buques mercantes de otras naciones son ” Vapores de la Fantasía”.

José Ismael Morales Pérez