Desde hace meses han sido muchas las denuncias hechas por los habitantes de Agua Salada, específicamente de la parte baja, en las que solicitan a las autoridades competentes un plan de asfaltado para sus intransitables vías.
Cada día los vecinos observan con dolor cómo las calles se deterioran, los huecos se hacen más grandes y nadie hace nada.
Hay quienes en ocasión a la Semana Santa manifiestan pedir a Dios y a los santos un milagro para ver si se logran asfaltar las calles del mencionado lugar.
«Los huecos son enormes, pasar por aquí es poner a sufrir los vehículos. Ya estamos cansados de denunciar esto por la radio, la prensa, hasta hemos hablado con las autoridades y nada que nos solucionan. Solo un milagro puede ocurrir para ver las calles como antes, sin huecos, asfaltadas, transitables», dijo Eduardo García.
A esta problemática se le suman los constantes bajones en el fluido eléctrico, la escasez de agua desde hace más de un año y la inseguridad reinante en la zona a todas horas. Redacción/GB
