La alianza OPEP+, liderada por Arabia Saudí y Rusia, ha anunciado hoy su decisión de incrementar la producción de petróleo en 548.000 barriles diarios (bd) a partir del 1 de agosto de 2025. Este volumen, superior en 137.000 bd a lo previsto por los mercados y a los incrementos de los tres meses anteriores, busca ajustar la oferta a una perspectiva optimista del mercado.
El acuerdo, alcanzado en una reunión telemática que duró poco más de diez minutos, involucra a ocho de los veintidós Estados miembros de la alianza: Arabia Saudí, Rusia, Irak, Emiratos Árabes Unidos, Kuwait, Kazajistán, Argelia y Omán. Estos «petroestados» aceleran, por segunda vez, la restitución de los 2,2 millones de barriles diarios (mbd) que retiraron voluntariamente en 2023, adicionales a otras reducciones del grupo.
El comunicado de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) señala que «los ocho países participantes implementarán un ajuste de producción de 548.000 barriles diarios en agosto de 2025, a partir del nivel de producción requerido para julio de 2025». Este aumento de la oferta equivale a cuatro de los incrementos mensuales de 137.000 bd que se habían pactado inicialmente en diciembre para la reversión lenta de los recortes.
Los ministros de estas naciones destacaron haber revisado «las condiciones y perspectivas del mercado mundial», justificando el aumento en la «solidez actual de los fundamentos del mercado, reflejada en los bajos inventarios de petróleo». Sin embargo, la OPEP+ también reiteró su disposición a suspender o revertir este plan de incrementos en cualquier momento si las condiciones lo requieren.
El recorte total que están revirtiendo «los Ocho» es adicional al de 3,66 mbd que la OPEP y sus diez naciones aliadas mantienen vigente hasta el 31 de diciembre de 2026. Es importante señalar que Venezuela, Irán y Libia, tres socios de la OPEP, están exentos de estos compromisos debido a las limitaciones involuntarias que enfrentan sus industrias petroleras.
Esta decisión se produce en un contexto de gran volatilidad en los precios del petróleo, marcada por conflictos como la guerra arancelaria, las tensiones en Oriente Medio y la situación en Ucrania. Tras el reciente estallido de la llamada «Guerra de los 12 días» entre Israel e Irán a mediados de junio, los precios se dispararon más del 12%, rozando los 80 dólares el barril, para luego retroceder tras un alto el fuego. El crudo Brent, de referencia para Europa, cerró la semana a 68,30 dólares por barril, con un retroceso del 0,73% respecto al cierre del jueves.
Los ministros de los ocho países se reunirán nuevamente el 3 de agosto para revisar la situación del mercado y definir el nivel de su oferta petrolera para septiembre.
Con información de agencias
