La Coordinadora Nacional de Derechos Humanos (CNDDHH), ha expresado su “profunda indignación” tras la muerte de un manifestante, identificado como Mauricio Ruiz Sanz, durante los actos de represión de las protestas llevadas a cabo este miércoles en Perú. La represión de las manifestaciones ha dejado también un saldo de más de un centenar de heridos.
En un comunicado, la organización no gubernamental manifestó su solidaridad con la familia del fallecido y exigió a las autoridades una respuesta inmediata. “Exigimos una investigación inmediata, exhaustiva e independiente que esclarezca los hechos y determine responsabilidades”, sostuvo la CNDDHH.
Mauricio Ruiz Sanz, conocido también por ser cantante de hip hop, fue trasladado al Hospital Loayza, en el centro de la capital peruana, luego de resultar herido durante las protestas. Medios locales confirmaron que su muerte fue certificada minutos más tarde en el centro médico.
Ruiz Sanz, formaba parte de las miles de personas que salieron a manifestarse en Lima y otras ciudades del país contra el Gobierno y el Congreso, en rechazo a la corrupción sistémica y al preocupante aumento de la inseguridad, impulsada por el auge del crimen organizado.
La movilización de este miércoles se ha calificado como la más grande de los últimos años, replicando el espíritu de las olas de protestas anteriores que pedían nuevas elecciones y se sucedieron tras la llegada al poder de la actual mandataria, Boluarte.
La CNDDHH reitera su llamado a las autoridades para que garanticen el derecho fundamental a la protesta pacífica y se detenga el uso excesivo de la fuerza contra los ciudadanos.
Con información de agencias
