jueves, abril 18, 2024

Hacer hallacas este año está difícil

¡La mejor hallaca la hace mi mamá! Esta frase a lo largo de los años se ha convertido en referencia de una de las más deliciosas tradiciones venezolanas con la llegada de las fiestas decembrinas, pues, la hallaca es sin lugar a dudas el ícono más representativo para estas fechas, por su sabor, por unir a las familias a la hora de su preparación y, sobre todo, porque “un diciembre sin hallacas no es diciembre”.

Sin embargo, este año debido a la crisis económica que atraviesa el país para mucho será muy cuesta arriba seguir con esta tradición, ya que, los precios de los ingredientes para las hallacas están bastante altos.

En un recorrido realizado por el equipo reporteril del diario El Luchador por el mercado Periférico y otros comercios en diferentes puntos se pudo constatar los precios de los diferentes productos usados para la elaboración de este tradicional plato.

A la fecha un kilo de carne de primera o segunda oscila entre los 68 y 70 mil bolívares, la carne de cerdo se puede conseguir desde los 110 mil bolívares, mientras que el kilo de pollo se puede hallar hasta en 57 mil bolívares.

En el caso de los aliños, tanto el kilo de pimentón como el de cebollas ronda por el orden de los 40 mil bolívares,  el ají dulce puede llegar a costar hasta 35 mil bolívares. Los encurtidos, dependiendo del tamaño del frasco o si los compra detallados, tienen precios que oscilan entre los 50, 100 y 160 mil bolívares; las alcaparras pueden hallarse desde 40 mil  hasta 85 mil bolívares, al igual que las aceitunas y las pasas.

Para los que usan harina de maíz precocido para sus hallacas, esta puede conseguirse desde los 26 a 32 mil bolívares, todo dependerá de la marca y el establecimiento de su preferencia.

Hay quienes usan papas y huevos para “adornar” su hallaca; en este caso, deberán disponer de 35 mil bolívares para comprar un kilo de papas y entre 83 mil a 98 mil bolívares para comprar un cartón de huevos.

Las hojas y el hilo pabilo no pueden faltar. Las primeras pueden conseguirse hasta en 15 mil bolívares, mientras que el segundo cuesta 20 mil bolívares.

Los aderezos dependen del gusto de cada familia. Por ejemplo, la sal puede encontrarse desde los 17 mil bolívares en adelante, un pote de adobo puede costar hasta 25 mil y la bolsita de onoto en grano cuesta desde 10 mil en efectivo.

La ocasión  fue propicia para recoger las impresiones de algunos compradores que se hallaban en el mercado al momento del recorrido.

“Sale caro hacer hallacas este año. Estoy viendo precios para hacer aunque sea unas 20 hallaquitas y ponerlas a congelar porque a medida que se van a cercando las fiestas decembrinas todo se pone más caro y es preferible comprar ahora”, manifestó Isabel Brito.

“Uno trata de hacer el esfuerzo para no perder la tradición pero no se trata solo de hacer las hallacas, es que a todo este gasto hay que sumarle el pan de jamón, la ensalada de gallina, el pernil, los refrescos, para la cena navideña; y si metes los regalos para los muchachos, los estrenos y si vas a hacerle un arreglito a la casa, mínimo nos da una subida de tensión porque de dónde uno saca plata con toda esta crisis. Es para llorar”, agregó Pedro Zerpa.

“Yo me recuerdo que hace algunos años atrás usted iba para cualquier casa en estas fechas y ya estaban haciendo hallacas, y si en tu casa habían 10 personas esa misma cantidad de hallacas se mandaba para esa casa, sin meter la que se te comías cuando hacías la visita, pero ahora, quién hace esa gracia: Nadie”, expresó Marelis Ramos.

“Lamentablemente, este año no tampoco voy a hacer hallacas. Todo está muy caro y lo poco que tenemos de dinero es para comprar medicinas y lo prioritario para la casa”, indicó Zoraida Aponte.

“Yo estoy haciendo hallacas y bollitos navideños para vender, como una forma para generar un ingreso. Comencé vendiendo las hallacas a 30 y los bollitos en 10; luego subieron los precios y tuve que aumentar las hallacas a 35 y los bollitos 15, hoy vengo a comprar ingredientes de nuevo y casi todo ha aumentado otra vez. Y estamos hablando de un lapso de tres semanas, aproximadamente, que empecé a vender”, resaltó Carlos Parra.

Aunque muchos afirman que a pesar de la crisis no dejarán a un lado las tradiciones propias de la época decembrina, otros por el contrario, aseveran que su prioridad sigue siendo comprar comida.

Redacción/GB

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