El femicidio se ha convertido en una epidemia que no ha podido ser atendida por las autoridades policiales
Los hermanos Junie Detsibeth Betancourt Sevilla de 21 años de edad y su hermano Marcos Antonio Betancourt Sevilla de 17 años, fueron asesinados, su mamá, Annie Desiree Sevilla Rondón de 43 también fue víctima de la violencia desatada por el esposo de Junie, un sujeto identificado como Jhor Frank José Ramírez.
Los hechos ocurrieron la mañana de este miércoles 16 de septiembre en la torre B edificio 4 del urbanismo de la Misión Vivienda, La Gran Victoria de Maturín, en la capital del estado Monagas donde residía el grupo familiar.
Junie Detsibeth Betancourt Sevilla tenía 5 meses de embarazo cuando fue estrangulada por su pareja, quien asesinó al adolescente cuando intentó salir a la defensa de su hermana y atacó brutalmente con un martillo a la madre de ambos cuando intentó proteger a sus hijos.
Según versiones extraoficiales, el asesino sería funcionario de la Guardia Nacional Bolivariana y habría intentado escapar del lugar, dejando tras de sí los cuerpos ensangrentados, el revuelo causado alertó a los vecinos quienes informaron a las autoridades policiales sobre lo que estaba ocurriendo.
Comisiones del Eje Homicidios del Cicpc iniciaron las averiguaciones por el caso y desplegaron funcionarios por los alrededores y lugares donde acudía Ramírez con la intención de localizarlo y detenerlo.
El operativo finalizó siete horas después de los asesinatos en la calle principal del sector Guanaguanay, parroquia Los Godos de Maturín, donde comisiones policiales intentaron detener al hombre quien al parecer abrió fuego en contra de las comisiones que le seguían los pasos y terminó malherido, luego se pudo conocer que el doble homicida murió en la sala de emergencias del hospital de Maturín.
Una epidemia que no ha podido ser controlada
La violencia femicida se ha incrementado en el país desde que se decretó la cuarentena con el objetivo de contener la propagación del coronavirus en Venezuela.
De acuerdo con datos manejados por la Organización No Gubernamental Cepaz, Centro de Estudios por la Paz, entre el 14 de abril y 13 de junio de 2020 se reportó a través de los medios de comunicación 24 casos de femicidios.
“Desde el 14 de abril hasta el 13 de junio de 2020, hubo en promedio, un femicidio cada 50 horas, en total, 10 niños y niñas quedaron huérfanos” señala el informe.
En el 62.5% de los casos, los hechos ocurrieron o bien en la casa de la mujer o en la casa de ambos, es decir, en el lugar que se supone debe ser el más seguro para cualquier persona terminó siendo el más inseguro para las víctimas de la violencia de género.
En el 95,8 % de las víctimas, eran de nacionalidad venezolana y en 33,4% de los casos tenía edades comprendidas entre 19 y 31 años. El 25 % de las mujeres víctimas de femicidios, eran madres y 4,16% de las víctimas estaban embarazadas.
Otro dato importante es que 41.7 % de los casos analizados, las mujeres murieron baleadas, 16.7% de las víctimas fueron estranguladas, 20.8% acuchilladas y 20,8% golpeadas.
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