Tener una buena rutina nocturna y un colchón cómodo no es lo único que se necesita para tener una buena noche de sueño; lo que se come puede tener un gran impacto en la calidad del descanso y, por ello, es importante vigilar también lo que se consume.
En los últimos años, el magnesio ha escalado en popularidad como uno de los minerales más famosos por su relación con un descanso más profundo y reparador, además de un mejor manejo del estrés.
El magnesio participa en varias funciones importantes del cuerpo, entre las que se incluyen la regulación de los niveles de cortisol, conocida también como la hormona del estrés. Esto puede ayudar a que se concilie el sueño más fácilmente; no obstante, no se trata de consumir suplementos de magnesio a la ligera.
Lo ideal es obtener este mineral a través de una dieta diaria y dejar que un profesional de la salud sea el que determine si es que se necesita un refuerzo adicional de magnesio.
Las verduras de hoja verde oscura son de las mejores fuentes naturales de magnesio, y entre ellas se encuentran las espinacas. Además de que ayudarán a relajar los músculos y el sistema nervioso, también aportan hierro, calcio y antioxidantes que pueden beneficiar la salud en general.
En los frijoles se tiene una fuente muy importante de proteína vegetal y de fibra, pero también contienen magnesio en buenas cantidades. Ayudan a mantener un sistema nervioso estable y un equilibrio adecuado de energía durante el día, así que pueden favorecer un descanso más profundo y reparador cuando llega la noche.
Con información Agencias-.
¿Consumir magnesio ayuda a dormir mejor?



