Florentino Pérez ha llegado a una conclusión prácticamente irrevocable: Zinedine Zidane tiene que dejar el banquillo del Real Madrid el verano que viene. Desde el punto de vista del presidente de la entidad blanca, el ciclo del francés ya está agotado. Sólo poco menos que un milagro, tal y como están las cosas, una tercera Champions consecutiva, podría lograr salvarle el cuello. Por eso, el dirigente madridista ya controla a un buen número de alternativas para el banquillo. Una lista en la que se ha colado a última hora un tapado de bestial: Jürgen Klopp.