Aún con la euforia de saberse la ganadora del primer Master Chef Latino, Sindy Lazo contó que durante las dos horas que duró la final del programa de Telemundo, el domingo pasado, estuvo pensando en su abuela Sarah Lazo, fallecida en 2012. “Gracias a ella me gusta dar amor a través de las artes culinarias”, recordó la también actriz.
La final del concurso culinario contó con dos venezolanos, Sindy Lazo y Andrés De Oliveira.
El jurado integrado por los chefs Benito Molina, Claudia Sandoval y Ennio Carota le confirieron a la ganadora un trofeo y 100.000 dólares por un menú inspirado en Venezuela que incluyó ceviche de langostinos con tostones y salsa de mango de aperitivo, asopado de cerdo al estilo de un guiso de hallaca con ensalada de ajoporro como plato principal y un helado de guanábana de postre. “La idea era realizar un viaje por Venezuela, comenzando por el Caribe con el ceviche, para luego pasar a un plato más caraqueño como lo es el asopado”, indicó la chef.
La preparación para la competencia fue un camino largo y tortuoso que tuvo un final feliz: “La incertidumbre de no saber qué recetas iba a cocinar fue lo más difícil que tuve que enfrentar”, recordó la ganadora. “Muchos días llegaba la medianoche y repasaba recetas mentalmente con un gran amigo venezolano que conocí justo antes de empezar la competencia”.
Confesó que su libro de cabecera durante el show fue Mi cocina de Armando Scannone. Y reconoció que Carlos García, el chef de Alto, ha sido una de las grandes influencias en su camino en la cocina.
Hoy, Sindy Lazo, de 40 años de edad, sabe que los sueños sí se pueden alcanzar. “Fue muy difícil para mí adaptarme a Estados Unidos. De hecho, tuve muchos problemas para conseguir trabajo al comienzo”, mencionó. “Por eso dedico este premio a todos aquellos que son inmigrantes, que están luchando, para que sepan que poco a poco encontrarán su destino, sobre todo, tomando en cuenta esos comentarios tan feos que se han hecho de los venezolanos trabajando en cosas que nunca pensaron en Estados Unidos”, agregó la actriz, quien antes de participar en Master Chef Latino estuvo trabajando en comedias.
“Si tuviera que elegir un ingrediente que extraño de Venezuela sería el ají dulce”, manifestó. “Durante el programa pedí el ingrediente por Internet, porque aquí no se consigue, pero recibí fue las semillas que tardarían mucho en dar frutos”. Y así como extraña sabores, dijo que ha vivido momentos de soledad con profundas ganas de reencontrarse con sus afectos. “Volvería al país, pero no en estos momentos”, aclaró.
Esta nueva etapa ha motivado a la primera Master Chef Latino a trabajar en otros proyectos, como lo es un libro parecido a La cocinita de Sindy, que combina crónica con recetas, pero esta vez agregará las experiencias vividas en el concurso. Cuál es su sabor y de dónde viene son las preguntas que se plantea responder. Sin embargo, afirmó que seguirá trabajando en su carrera como actriz y que parte del premio lo destinará a la fundación Wayuu Taya, de la también venezolana Patricia Velásquez, que se ha dedicado a ayudar a la comunidad indígena wayúu y con la cual ella y su madre, la actriz Mimí Lazo, han contribuido durante algunos años.
Radicada en Los Ángeles, Sindy Lazo no quiso dejar pasar la oportunidad para expresar su agradecimiento al público venezolano. “Ha sido muy bonito ver tanta a gente apoyándome”, señaló.
Por Instagram Live transmitió el capítulo final de Master Chel Latino, que fue seguido por más de 100.000 personas durante 2 horas. “Más allá del reconocimiento de ser la primera Master Chef Latino, es este el cariño que de verdad te llena”, finalizó.