El presidente de la Federación de Cámaras y Asociaciones de Comercio y Producción de Venezuela (Fedecámaras), Carlos Larrazábal, rechazó este miércoles las respuesta del Gobierno nacional tras el cierre de Alimentos Kellogg, aseguró que la medida del presidente, Nicolás Maduro, de solicitar código rojo ante la Interpol a sus directivos y dueños, está fuera de orden porque no se cometió ningún delito.
“Lo primero que es curioso es que el presidente asuma una posición como si fuera un tribunal cuando no se cometió un delito. Delito es toda la corrupción que hemos visto”, manifestó durante una entrevista en el Circuito Éxitos.
En este sentido, indicó que la compañía multinacional cumplió con todas sus obligaciones con los trabajadores, tras cancelar sus prestaciones sociales y demás compromisos laborales, además afirmó que la causa del cierre es por el actual modelo económico, el cual aseveró hace imposible que muchas empresas puedan seguir operando en el país.
“Las empresas no pueden seguir operando a pérdidas por mucho tiempo y eso lleva al cierre dramático de Kellogg. Esto refleja la tristeza de ver el cierre de una empresa que nos ha servido el desayuno durante muchos años”, agregó Larrazábal, quien señaló que Fedecámaras se suma a la posición de la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) y solicita la suspensión de las elecciones del 20 de mayo.
“Si no cambia el modelo económico se hace más difícil de operar (…) nos sumamos a la posición de la Iglesia que lo mejor es suspender este proceso del domingo y pasarlo a finales de año”, recalcó.
CD
