En defensa de la universidad y por un salario digno, autoridades, profesores, empleados, obreros y estudiantes del núcleo de Bolívar de la Universidad de Oriente (UDO) elevaron su voz de protesta ante la crisis que agobia al sector universitario en general.
Para la intergremial udista, que agrupa a Apudo, Aspudo, Aseudo, Studo y movimiento estudiantil, el núcleo de Bolívar, y la Universidad de Oriente en general, no escapa a la caótica situación país, sumado a una hiperinflación que pulveriza los salarios de sus trabajadores y una inseguridad que sigue saqueando sus instalaciones y acosando a su comunidad.
“Esta concentración representa el sentir udista, el sentir de la comunidad universitaria, en defensa del núcleo y de la UDO. Con esto queremos hacerle ver al gobierno la unidad monolítica que tiene la universidad en defensa de sus intereses y comunidad”, señaló la decana del núcleo de Bolívar, profesora María Coromoto Casado.
La autoridad udista señaló que los trabajadores no disponen de un salario que les permita responder a sus necesidades, y esto nos indica “que la economía no está funcionando bien el país”, bajo este contexto, precisó que mientras exista una hiperinflación los sueldos por mucho que sean aumentando no cubrirán las necesidades.
Esgrimió la falta de recursos financieros por parte del nivel central, y la manera como han venido funcionando. “Si no tenemos para comprar un bombillo, cómo podemos garantizarle a los estudiantes unas aulas de clases adecuadas”, añadió.
Advirtió que a pesar que han registrado una deserción, tanto laboral como estudiantil, que se ubica en un 30% siguen estando por debajo del resto de las universidades autónomas.
Para el presidente de la Asociación de Profesores del Núcleo (Apudo Bolívar), profesor Félix Martínez, cada día se hace más caótica la situación para los universitarios udistas, máxime cuando devengan “salarios de miseria”, no tienen HCM, y deben enfrentar a diario una inseguridad que se hace constante en las aulas, pasillos y espacios universitarios. Prensa UDO Bolívar