La apuesta de Satya Nadella por el emergente negocio de la gestión de datos permitió a la compañía Microsoft superar el nivel de los 100.000 millones de dólares anuales en ingresos. El ejecutivo asegura que es la prueba de que las inversiones iniciales empiezan a dar resultados. Pero pese a este impulso, la tecnológica de Redmond sufrió una caída del 35% en el beneficio durante el ejercicio.

La cifra de negocio de Microsoft creció un 14% en el año, hasta los 110.360 millones. De ese total, 30.090 millones corresponden a los tres últimos meses del ejercicio. Estas ventas globales le aportaron una ganancia neta de 16.570 millones, de los 8.870 millones fueron en la recta final de su ejercicio fiscal. El negocio de la computación en la nube le generó 6.900 millones en ingresos.

Nadella sometió a un profundo cambio estratégico a Microsoft cuando tomó las riendas de la compañía, buscando diversificar los ingresos y dejar de depender del sistema operativo Windows para ordenadores personales. La compañía también abandonó la telefonía móvil, donde entró tarde. Actualmente es el segundo actor en la nube por delante de Google, con Amazon dominante.

Microsoft viene de cerrar un acuerdo con Walmart para ofrecerle servicios de gestión de datos durante cinco años. Es el ejemplo más evidente de las alianzas que se están creando para tratar de competir con Amazon. Junto con Apple, las tres tecnológicas libran una reñida carrera para llegar al billón de dólares de valoración bursátil. Sus acciones se apreciaron un 40% durante el último año.