Si siempre te has preguntado si tu perro sabe cómo te sientes, y supusiste que así era, estás en lo correcto: los canes no solo son los mejores amigos, sino que pueden ponerse en tus zapatos.
Fieles amigos, los perros lo son hasta el final. Cuando a lo mejor otras personas ya se dieron por vencidas, ellos siguen alrededor. Un estudio demostró no solo que están conscientes de lo que sientes, sino que son capaces de romper paredes -si fuese el caso- para consolarte.
En un artículo publicado en la revista ‘Learning & Behavior’, los investigadores escriben que los perros que tienen fuertes lazos con sus dueños son capaces de a empujar una puerta cuando los escuchan llorar, tal como lo reseñó Europa Press.
«Descubrimos que los perros no solo sienten lo que sienten sus dueños, sino que atravesarán barreras para ayudarlos», explicó la autora principal del trabajo, Emily Sanford, estudiante de posgrado en el Departamento de Psicología y Ciencias del cerebro en la Escuela de Artes y Ciencias Krieger de la Universidad Johns Hopkins.
«Es probable que los perros hayan desarrollado su capacidad para comprender las emociones humanas a medida que los domesticamos», plantea Sanford en entrevista con Contrapunto vía correo electrónico.
Y ¿cómo saben los perros cómo nos sentimos? «Hay muchas señales potenciales que los perros podrían usar para entender las emociones humanas. Por ejemplo, pueden entender cuando apuntamos a las cosas. Probablemente usan una combinación de pistas auditivas, visuales y olfativas para determinar los estados emocionales de los humanos», detalla. Por la razón que sea, una o una combinación de varias, ellos están conectados con nosotros.
Tan conectados, que llegan al punto de estresarse si estamos en peligro. «Los perros ciertamente pueden estresarse cuando su dueño está en peligro», puntualiza Sanford. «De hecho, algunos de los perros estaban tan estresados por el llanto de sus dueños durante el experimento que estaban esencialmente incapacitados y no abrieron la puerta».
Lo estrecho de ese lazo entre los perros y nosotros «es algo que evoluciona con el tiempo, al igual que en las relaciones humanas», recuerda la investigadora. Por ende, «tratar bien a los perros, amarlos y establecer confianza ayudará a fortalecer el vínculo emocional y, por lo tanto, la probabilidad de que responda con empatía».