El diputado indígena por los estados Apure y Amazonas, Romel Guzamana, denunció que disidentes de la guerrilla colombiana, encabezada por el Ejército de Liberación Nacional (ELN), están entrenando a dirigentes indígenas venezolanos, con el apoyo del gobierno, por lo que le exige se saquen a estos irregulares del país.
Señaló el parlamentario que tiene información certera de que hay poblaciones indígenas enteras tomadas por estos campamentos guerrilleros, mencionando entre ellas a Picatonal, El Palmar de Galipero, Eje Provincial y Pozón de Bavilla hasta llegar a Bolívar por Parguaza y Salto Maraca.
Acusó al ministro de la Defensa Vladimir Padrino López de tener negocios con la guerrilla colombiana, a quienes, dijo, metieron en Venezuela, por lo que ahora debe pagar las consecuencias de haber metido estos irregulares en territorio indígena. Pide que se interpele al funcionario porque reiteradamente se ha denunciado esta delincuencia armada en territorio indígena, sin que se haga nada.
Calificó también a Padrino López como mentiroso por decirle al pueblo que la masacre de los tres militares en la comunidad de Picatonal, Puerto Ayacucho, Municipio Atures, del estado Amazonas, fue cometida solo por paramilitares.
“Nosotros decimos que fueron fuerzas subversivas del ELN, con la disidencia de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). Esta última abandonó parte del territorio colombiano y ahora está presente en casi el 100 % del territorio venezolano”, denunció el parlamentario indígena.
Aseguró que las acusaciones contra el diputado Américo de Grazia, por parte del oficialismo al vincularlo con la mafia del oro, se dan porque este parlamentario está impulsando la denuncia pública de lo que está ocurriendo en las zonas mineras,”y nosotros lo respaldamos porque queremos que estos sean del conocimiento de todos”.
Precisó que cuando Padrino López señala a los paramilitares como autores de la masacre, es para escudarse y no responder por los negocios que él tiene con estos grupos y no quedar mal.
Aseveró Guzamana que cuando la guerrilla colombiana ataca a los componentes militares, quiere decir que la guardia nacional está negociando con los subversivos Paracos de Colombia, el oro, los diamantes, el coltan, la nacionalidad y el territorio, porque este es el gran negocio para que se lleven todas las riquezas del territorio.
Finalizó destacando, en cuanto a los militares, que quienes pagan los platos rotos son los funcionarios de bajo rango, “pero los negociadores son los de alto rango, quienes está comprobado que, junto con Padrino López, se la pasan en Amazonas buscando el oro y dando órdenes para proteger a los insurgentes”.