Con una población muy polarizada ideológicamente entre el avance en derechos y el respeto a los valores tradicionales, la Corte Constitucional de Ecuador emitió ayer un fallo histórico a favor de los matrimonios entre personas del mismo sexo.
La votación estuvo tan dividida como el sentimiento popular -5 votos a favor y 4 en contra- pero, finalmente, dos parejas de homosexuales recibieron el visto bueno constitucional para casarse, abriéndose así la puerta al matrimonio LGBTI en el país.
«Pienso en mis alumnos y en mis amigos y lloro de emoción. Ya nadie les podrá decir que sus sentimientos y su opción de vida son anormales”, dijo a la prensa la abogada de derechos humanos María Dolores Miño.
Cientos de personas salieron a las calles y ondearon banderas arcoíris en Guayaquil y Quito, las dos principales ciudades del país.
Ecuador es desde esta semana (junto con Argentina, Brasil, Costa Rica, Colombia y Uruguay) uno de los 6 países sudamericanos que han hecho algún tipo de reforma legal para conceder a todas las parejas, indistintamente de la orientación sexual de sus miembros, la posibilidad de acceder a todos los derechos y obligaciones del matrimonio civil.