Los Yankees de Nueva York y Medias Rojas de Boston han protagonizado en la historia del béisbol la rivalidad más dura y férrea de las Grandes Ligas.
¿Qué mejor manera de empezar la fiesta del diamante en Europa que con una serie entre estos dos históricos? Por lo mismo, el Estadio Olímpico de Londres se transforma hoy en un rombo en donde la pelota no rodará por el césped sino más bien, volará.
¿Cómo llegan los contendientes?
Con los «Mulos del Bronx» siendo el segundo mejor equipo de las mayores detrás de los Dodgers de Los Ángeles pero con el mejor récord de la Liga Americana (52-28) según MLB, llegan a tierras británicas como la máxima atracción para los fanáticos ingleses, sobre todo si se toma en cuenta que son el conjunto de béisbol más caro de la historia, según la revista Forbes con más de 3700 millones de dólares en su haber.
Figuras representativas como Aaron Judge, Luke Voit, Gary Sanchez o hasta los latinoamericanos Giovanny Urshela y Gleyber Torres, tratarán de ayudar a Masahiro Tanaka en su enfrentamiento con Rick Porcello de los Medias Rojas de Boston.
Si bien es cierto los patirrojos marchan terceros en la división Este, a nueve juegos de los Yankees, siempre son capaces de aguarle la fiesta a los bombarderos del bronx, aún cuando estos últimos puedan tener el amplio cartel de favoritos.
Por otro lado, los dirigidos por Alex Cora, que no han tenido su mejor comienzo de temporada, siguen manteniendo un buen diferencial de ganados y perdidos con (44-38) pero a dos juegos de los Rays de Tampa Bay.
A este paso, a pesar de que aún no ha finalizado la primera mitad de temporada, los Medias Rojas deben pisar el acelerador sobretodo con sus rivales de división, especialmente con los Yankees que se mantienen líderes. De lo contrario, se les puede complicar incluso la opción del comodín y estarían lejos de revalidar su título de campeones mundiales, obtenido el año pasado ante los Dodgers.
Con Mookie Betts y JD Martinez como sus principales armas ofensivas, los oriundos del Fenwey Park querrán hacer cuenta de que jugarán en Londres como si fuese su casa, para poder «batear a placer» y con su pitcheo contener a la fuerte alineación newyorkina que es el cuarto conjunto del big show con más jonrones conectados (134) hasta los momentos, según ESPN.
