Miles de habitantes de un barrio de Fráncfort, e incluso el edificio del Banco Central Europeo (BCE), fueron evacuados este domingo para la desactivación de una bomba estadounidense de la Segunda Guerra Mundial en esa área, constató la AFP.
Todos los residentes de la zona afectada, empleados y clientes de hoteles, es decir, unas 16.500 personas en el este de la capital financiera alemana, debían haber salido del lugar hacia las 08H00 (06H00 GMT) para que pudiera comenzar la operación, programada desde hace varios días.
La desactivación de la bomba de fragmentación estadounidense, de 500 kg, equipada con dos detonadores y encontrada en junio en unas obras, debe terminar a última hora de la tarde, indicaron la policía y los bomberos.
Se dejarán fuera de servicio dos detonadores. La operación se auguraba complicada porque uno de los detonadores está dañado, según los bomberos, que sin embargo descartaron una explosión controlada.
«Previmos cuatro horas para ello», indicó el domingo uno de los responsables de la operación, René Bennert.
Todo el edificio del BCE, que tiene su sede en Fráncfort, también fue evacuado, así como una zona de alrededor de un kilómetro alrededor de la bomba.
Con todo, el BCE seguirá funcionando, dijo un portavoz de la institución. Los empleados «podrán trabajar desde otros lugares si fuera necesario», indicó al diario Frankfurter Allgemeine Zeitung.
Alemania tiene una gran experiencia en este tipo de evacuaciones, pues no todas las bombas que se lanzaron contra su territorio durante la Segunda Guerra Mundial explotaron, y regularmente se siguen hallando en excavaciones y obras.
La mayor evacuación de este tipo desde 1945 tuvo lugar en septiembre de 2017, en Fráncfort, donde se encontró una enorme bomba británica con una carga explosiva de 1,4 toneladas. Unos 65.000 habitantes tuvieron que dejar su vivienda.