La noche del viernes el Comando Estratégico Operacional de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (Ceofanb) denunció que el Comando de Defensa Aeroespacial Integral (Codai) detectó e interceptó una aeronave proveniente de Estados Unidos en la Región de Información de Vuelo Maiquetía.
La información aportada reveló que se trató de un EP-3E ARIES II que “es un avión de cuatro motores, de ala baja, de inteligencia y guerra electrónica, que utiliza equipos de última generación para incursionar e interferir sistemas de comunicaciones”. El Ceofanb rechazaba de esta manera lo que calificó como una “violación a los Tratados Aéreos Internacionales en franca provocación a la República Bolivariana de Venezuela”.
Por su parte, el ministro para la Defensa, Vladimir Padrino López, resaltó que “esta aeronave ingresó a la Región de Información de Vuelo controlada por Venezuela sin reporte de frecuencia aeronáutica”. En palabras del jefe militar, la acción incumplió las normas de la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI), la agencia de la ONU que se encarga de estudiar los problemas de aviación civil internacional. Padrino López advirtió también que dicho acto constituyó un “riesgo para otras aeronaves».
«Es imposible descartar la actuación armada»
En respuesta a la acusación, el Comando Sur de Estados Unidos utilizó la misma red social para rechazar que un avión norteamericano EP-3 haya sido “agresivamente perseguido” por un Sukhoi SU-30 venezolano de fabricación rusa. La institución armada detalló que la aeronave les alcanzó “a una distancia insegura el 19 de julio, poniendo en peligro a la tripulación y al avión”. Globovision.com