Con poco en juego en el Gran Premio de Brasil este fin de semana, la carrera de Fórmula Uno en Sao Paulo es una oportunidad para que los hinchas recuerden y celebren al favorito local Ayrton Senna, 25 años después de su muerte.
Lewis Hamilton, un gran fanático del legendario piloto brasileño, y su equipo Mercedes se aseguraron ya los títulos de piloto y escudería en la campaña, con segundos lugares para Valtteri Bottas y Ferrari, respectivamente.
Un helicóptero de la televisión brasileña pintado con los colores verde y amarillo del casco de Senna estuvo sobrevolando alrededor del circuito Interlagos desde el jueves. Carteles en la pista dicen “Obrigado, Senna” (Gracias, Senna) como parte de una campaña en los medios sociales para recaudar fondos para el instituto infantil que lleva su nombre.
El tricampeón de F1 Senna murió tras un accidente en el Gran Premio de San Marino en mayo de 1994. Su auto McLaren estará en la pista antes de la carrera del domingo. Bruno Senna lo conducirá y va a frenar para tomar la bandera brasileña de manos de un agente de carreras, como lo hizo su tío tras ganar en Sao Paulo.
Muchos de los 60.000 esperados para la carrera lucirán camisetas y banderas con la imagen de Senna. Sin pilotos brasileños en la parrilla, los comentaristas locales se están centrando en el carismático piloto que ganó el campeonato en 1988, 1990 y 1991.
El seis veces campeón de F1, Lewis Hamilton, lucirá de nuevo un casco que rinde tributo al ídolo de su infancia. A Hamilton se le ha preguntado sobre su relación con Senna en cada entrevista y conferencia de prensa en Sao Paulo.
Sebastian Vettel, de Ferrari, que tiene cuatro campeonatos, también va a rendirle tributo a Senna, con un brazalete verde y amarillo. Vettel visitó el instituto de Senna, que se centra en proyectos educacionales para niños pobres.
Hamilton ganó dos veces el GP brasileño, incluyendo el año pasado, y Vettel triunfó tres veces.
Fanáticos en la pista, como Elton Campos, de 37 años, dijeron el sábado que apoyarán a Hamilton porque es claro que el británico adora a Senna.
“Inicialmente él no me caía muy bien porque Hamilton impidió que (el brasileño) Felipe Massa ganase el campeonato aquí en el 2008”, dijo Campos, que llevaba una gorra que decía “Senna para siempre”.
“Pero Hamilton respeta mucho a Ayrton, realmente lo quiere y ahora los hinchas brasileños nos sentimos como que debemos devolverle el favor”.
Las conmemoraciones comenzaron hace una semana en un evento con patrocinadores cuando el dos veces campeón Emerson Fittipaldi condujo el Lutus de 1985 de Senna por las calles de Sao Paulo, lo que hizo llorar a algunos fanáticos.
Senna condujo ese mismo coche para ganar su primera carrera de F1 en el GP de Portugal.
“No sé qué decir, son demasiadas emociones, demasiados recuerdos”, dijo Fittipaldi con lágrimas en los ojos tras abrazar a la hermana de Senna, Viviane.
El veterano periodista Flávio Gomes, que cubrió a Senna en F1, dice que el piloto no estaría necesariamente de acuerdo con toda la atención.
“Da la impresión de que Senna fue lo único bueno que produjo Brasil en la Fórmula Uno”, dijo Gomes. “Seis pilotos han ganado carreras. Otros dos, Fittipaldi y Nelson Piquet, han ganado títulos. Reducir la historia brasileña en la F1 a Senna es muy injusto. Y pienso que él no estaría de acuerdo tampoco”. (Agencias)