Pero esta dedicación a mostrar la mejor imagen, es más significativa para las mujeres de este país, pues, no es casualidad que Venezuela esté catalogado como el país de las mujeres más bellas; desde la más sencilla hasta la más extravagante todas, absolutamente a todas las mujeres les encanta verse muy bien, pero como bien reza otro conocido adagio “para ser bellas hay que ver estrellas”, sin embargo ante la actual situación económica que atraviesa el país, además de ver estrellas hay que preparar muy bien el bolsillo para mantener la imagen, pues, un pequeño “cariñito” en una peluquería puede llegar a costar hasta más de un salario mínimo.
El equipo reporteril del diario El Luchador hizo un recorrido por algunas peluquerías de la ciudad y diversos establecimientos que ofrecen productos de belleza y esto que lo que encontró:
Los precios de los cortes de cabello para damas varían dependiendo el tamaño del mismo y van desde los 100 mil a 250 mil bolívares; además del corte, si la fémina desea secado y planchado debe pagar 250 mil bolívares como mínimo.
Si se trata de un cambio de look, por ejemplo hacerse una mechas, la dama tendrá que invertir 1 millón 800 mil bolívares como mínimo, esto si la peluquería le ofrece colocarle el tinte y todos los materiales necesarios para ejecutar dicho trabajo.
Hay quienes van más allá y requieren de tratamientos más profundos para sus cabellos, tales como algún tipo de alisado, en estos casos lo más común es la aplicación de keratina, la cual oscila entre los 600 mil a 800 mil bolívares, dependiendo del largo del cabello. El costo del producto es aparte.
Ante estos costos, son muchas las mujeres que ya no acuden con tanta frecuencia a la peluquería es por ello que prefieren hacerse sus cuidados de belleza en casa, buscando por supuesto el ahorro, razón por la cual acuden a establecimientos dedicados a la venta de artículos para peluquería.
En estos comercios, muchos de los productos son ofrecidos en divisas, por ejemplo el tinte más económico cuesta hasta 3.5 dólares, todo depende de la marca y del color; otros, de marcas más reconocidas van desde los 4.7 a 5.5 dólares, en este caso dependerá si la clienta lo elige con o sin el agua oxigenada para su preparación.
Otros productos como las populares ampollas hidrantes se consiguen desde los 150 mil bolívares, y en la mayoría de los casos deben pagarse en efectivo.
Una modalidad que se ha vuelto muy popular entre aquellas mujeres que poseen un bajo nivel adquisitivo es acudir al mercado y comprar los famosos tintes chinos, los cuales se ofrecen en pequeñas cajas que van desde los 21 mil a 25 mil bolívares.
Precios de champú también son altos
Adquirir champú también se ha vuelto cuesta arriba, si bien es cierto que este producto abunda en los anaqueles no es menos cierto que las imitaciones están a la orden del día ofertándose a costos muy bajos en comparación con los productos originales, y con una calidad tan baja como sus precios. Por ejemplo un champú anticaspa de imitación cuesta desde 88 mil bolívares en adelante en su presentación de 210 ml, mientras que en otros expendios en los que se ofrece la marca original, estos superan los 400 mil bolívares, y el champú para cabellos sedoso o graso, se pueden hallar imitaciones hasta en 180 mil bolívares.
Hablan las mujeres
“Antes se decía que para ser bellas había que ver estrellas ahora lo que hay es que tener mucha plata y ver bien los precios. Yo podía acudir a una peluquería hasta dos veces por semana, ahora vengo una vez al mes, del resto trato de arreglarme en mi casa. Imagínate, pagando un secado a 250 mil bolívares si vengo dos veces a la semana son 500 mil que en un mes hacen 2 millones de bolívares que lamentablemente en ese tiempo no me los gano. Es lamentable”, expresó Edith Gómez.
“Yo he tenido que meterme a peluquera para poder mantener mi imagen, mi sueldo no me da como para ir a hacerme algo en una peluquería. A veces compro los tintes chinos que aunque no duran mucho por lo menos son más económicos y me sirven para resolver y no andar fea”, explicó Karen Rodríguez, entre risas.
“En mi caso andar en una peluquería es un lujo, la prioridad es la comida. Prefiero estar despeinada a que mis hijos tengan hambre”, aseveró la señora Juana.
“Por mi trabajo es obligatorio mantener una imagen y por autoestima también, entonces lo que hago es ingeniármelas, reúno para comprar un buen tinte, bajo tutoriales por internet sobre tratamientos para el cabello, en fin busco ahorrar pero sin perder el glamour. Primero muerta que sencilla”, añadió Cindy García.
Peluquerías casi vacías
Algunos trabajadores de peluquerías también dieron su punto de vista ante los costos de los servicios que ofrecen.
“Lamentándolo mucho estamos viviendo una situación que nos afecta a todos, nadie escapa de la crisis, nosotros no somos la excepción. Vemos que la concurrencia de clientas ha bajado mucho en comparación con otros tiempos, pero tratamos de ingeniárnoslas para mantenerlas”, dijo Alberto.
“Nosotros hacemos promociones, ofrecemos cortes y secados a mitad de precio para atraer clientas. Hacemos concursos por redes sociales, por emisoras de radio y así hemos logrado mantenernos activos”, expresó la dueña de una peluquería que prefirió mantenerse en el anonimato.
“Envista de que la peluquería en la que yo trabajaba cada día iban menos y menos clientas decidí abrirme paso por mi cuenta y puedo negociar los precios con las clientas, incluso trabajo a domicilio y he logrado salir adelante”, contó Carmen Guerra.
Este es escenario de costos que mostramos en esta entrega solo abarca cuidados para el cabello, pues, existen otros cuidados cuyos precios también habría que analizar, tales como, la depilación, manicure, pedicure, maquillaje, pestañas, uñas postizas, entre otros.
Para nadie es un secreto que no existe ningún sector que escapa de la crisis económica venezolana pero lo cierto del caso es, que cuando se trata de mantenerse bella la mujer venezolana, y en especial la bolivarense, hace hasta lo imposible por mantener su imagen, pues, como algunas de ellas comentó, “primero muerta que sencilla”.
Redacción/GB



