La ciudad italiana de Verona, en la región del Véneto (norte), ha comenzado la experimentación de la candidata italiana a vacuna contra el coronavirus en los primeros seis voluntarios, entre los que se encuentran un joven de 18 años y un médico de 54.
Se trata de un ensayo clínico que está llevando a cabo Italia en 90 voluntarios de Verona y Roma, y que probará la eficacia de esta vacuna, creada, producida y patentada por la empresa biotecnológica italiana ReiThera.
En total, en la primera fase se probará en 90 personas de edades comprendidas entre los 18 y los 85 años.
En Verona, el responsable de llevar adelante este ensayo es el Centro de Investigación Clínica del Hospital Borgo Roma, fundado en 2005; mientras que en la capital italiana lo hace el hospital Lazzaro Spallanzani, especializado en enfermedades infecciosas.
De hecho, ya en agosto el Spallanzani comenzó a testar las primeras dosis en otros voluntarios: la primera en someterse a esta experimentación fue una mujer de 50 años.
Verona ha comenzado este martes con sus primeros seis voluntarios, entre los que se encuentran un joven de 18 años y un médico de 54, según los medios italianos.
Las pruebas en Roma y Verona se realizarán en dos grupos, uno de edades entre los 18 y los 55 años, y otro de los 65 a los 85 años, para comprobar las respuestas que dan los distintos colectivos.
Francesco Vaia, director sanitario del hospital romano, declaró en agosto que si todo va bien «habrá la segunda y tercera fase de experimentación que probablemente» se practicará en «un país de Latinoamérica, donde el virus está en fase de crecimiento».
Italia fue el país de Europa más golpeado por la pandemia de coronavirus al principio de la emergencia sanitaria, y el primero del continente en confinar a toda su población.
Italia acumula 35.553 fallecidos y 278.784 casos totales de contagio desde que comenzó la emergencia el 21 de febrero, según los últimos datos oficiales del lunes.
EFE