***Sin agua desde hace dos años, sin gas doméstico desde hace semanas y fallas importantes en el suministro eléctrico casi a diario son solo parte de las calamidades que aquejan a quienes allí viven
Vecinos del sector Agua Salada de Ciudad Bolívar hablan con desconsuelo sobre cómo han visto deteriorarse su calidad de vida en los últimos meses.De lo que fue uno de los sectores que gozaba de las mejores condiciones en los servicios públicos solo queda el recuerdo.Sin agua desde hace dos años, sin gas doméstico desde hace semanas y fallas importantes en el suministro eléctrico casi a diario son solo parte de las calamidades que aquejan a quienes allí viven.
Carlos Vera cuenta cómo pasaron 25 horas sin electricidad durante el fin de semana.»Después del aguacero se fue la luz y aquí tuvimos más de un día sin electricidad. Niños y ancianos desesperados porque es insoportable estar tantas horas sometidos a las inclemencias del calor y a merced de las plagas, quién descansa así. Eso sin contar que en muchos hogares ni siquiera habían podido comer porque en vista de que tampoco hay servicio de gas doméstico muchos tienen sus cocinas eléctricas pero sin energía como las ponen a funcionar. El domingo en la tarde se solucionó lo de la electricidad porque entre todos los vecinos afectados pagamos 150 dólares para que arreglaran la falla. Yo me pregunto quién responde por eso. Estamos solos, aquí no hay un ente que nos de servicios. Aquí se acabó la calidad de vida», detalló.
La última vez que recibieron gas doméstico en Agua Salada fue hace casi tres meses gracias a un operativo especial activado por las autoridades, sin embargo, hasta ahora no han recibido más el servicio y no hay fecha para una nueva jornada de recarga de cilindros, lo que es aprovechado por especuladores para ofrecer la recarga de bombonas a precios en divisas, de acuerdo a los declarantes.»Gas no tenemos desde ya varias semanas. Eso también se volvió en una agonía. Aquí trajeron un operativo hace como tres meses y de ahí más nunca. Lo que si sobran son revendedores que, no sé de dónde sacan el gas, y te ofrecen una bombona hasta en 20 dólares, eso sí es pequeña porque la mediana vale más y la grande ni se diga», añadió José Gómez.
El servicio de agua potable por tuberías ya cumple dos años de ausencia. Quienes hacen vida en esta zona se las ingenia diariamente para abastecerse del vital líquido.»Cómo ya ni comprar agua se puede porque tampoco tenemos efectivo, entonces me ha tocado irme caminando con mi carrucha a buscar agua a varias cuadras de mi casa; incluso, hay casas en donde tienen pozos perforados y con toda la pena del mundo he tenido que tocar la puerta y pedir que me regalen agua. Ojalá en algún momento haya aunque sea justicia divina y nuestra situación cambie porque vivir así es deprimente», relató el sr Luis.
A todas estas vicisitudes se suman problemas como las deficiencias en el servicio de transporte público, falta de efectivo, inseguridad, entre otros. (Redacción/GB)
