El autismo en los gatos no se puede reconocer observando sus comportamientos, pues los signos del autismo comunes son comportamientos normales en un gato, como evitar el contacto físico.
Las actitudes de un gato autista varían dependiendo de la raza, del ambiente en el que se encuentren y del trato que reciban.
Para detectar un posible autismo en los gatos no deben observarse sus comportamientos habituales, sino prestar atención a los cambios repentinos de sus actitudes. Estos comportamientos que son fuera de lo común en un gato es lo que permiten determinar si podría tener algún tipo de autismo. Si los observas en tu gato, consulta al veterinario para que pueda descartar las posibilidades de que el animal esté sufriendo alguna alteración del espectro autista.
Recuerda que no debes presionar a tu gato a que haga cosas que no desea, ni obligarlo a jugar cuando no quiere hacerlo, porque puede reaccionar violentamente y adoptar un comportamiento agresivo y lastimarte.