Las propias escuelas de samba, cuya financiación depende en gran parte de la venta de ingresos para sus eventos y los famosos ensayos de los desfiles del carnaval, venían presionando a la alcaldía, a menos de un mes de las elecciones municipales, para poder volver a operar.
La alcaldía de Río de Janeiro autorizó la apertura de las escuelas de samba para eventos y sus tradicionales fiestas a partir del 1 de noviembre próximo, pese a que el covid-19 continúa fuera de control en la segunda mayor ciudad brasileña.
Estos gigantescos clubes recreativos manifestaron su contrariedad hace dos semanas cuando la alcaldía autorizó la realización de eventos culturales y recreativos con público en lugares cerrados, incluyendo espectáculos y bodas, y los excluyó de la lista.
Según la norma publicada este martes, para evitar aglomeraciones, los organizadores de eventos tendrán que cumplir todos los protocolos de prevención del covid, así como limitar el aforo al 50 % de la capacidad, distanciar las mesas y numerar las sillas.
La alcaldía igualmente autorizó a bares y restaurantes a abrir sin restricciones de horario a partir del 1 de noviembre.
Con información de UniónRadio
