En el caso del Centro Refinador Paraguaná, ubicado en el estado Falcón, desde que se reactivó en mayo pasado, las diferentes unidades que conforman la infraestructura han estado sujetas a una serie de paradas y reactivaciones, que han ocasionado serios incidentes.
El gobierno de Nicolás Maduro apuesta por la operatividad de las refinerías de Amuay y Cardón, para acabar con la escasez de gasolina que golpea a la población, pero estas plantas solo han operado durante 90 días en lo que va del año 2020, según publica un trabajo especial de Ahiana Figueroa, periodista de TalCual.
Expone fallas eléctricas, incendios, derrames y fugas de gas, como algunos de los incidentes que no han dejado establecer una operatividad de 100%, para la producción de carburantes y otros derivados del petróleo.
Según trabajadores de la industria, Petróleos de Venezuela (Pdvsa), desde que inició este año las labores para reactivar las refinerías, solo ha podido realizar operaciones en apenas tres de los últimos 10 meses.
Indica la investigación, que la falta de inversión para el mantenimiento de la infraestructura petrolera ha sido la principal debacle en el complejo refinador venezolano, con una capacidad de producción de 1,3 millones de barriles diarios y que por ahora solo cubre menos del 20% de la demanda interna.
Iván Freites, representante sindical citado por la periodista, dice que en lo que va de año solamente Cardón ha podido poner en operatividad varias de sus plantas, más no así Amuay y El Palito, esta última en Carabobo.
El líder sindical sostuvo que Pdvsa no está respetando los protocolos de seguridad que se deben ejecutar en caso de un arranque o parada de una refinería y es por ello que se desencadenan los incidentes.
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