El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, ha afirmado que su país está «viviendo el final de la pandemia», justo cuando la cifra de fallecidos por coronavirus está a punto de alcanzar las 180.000 personas tras un incremento de casos en las últimas semanas.
Durante la inauguración del eje principal del Puente Guaíba, en Porto Alegre, el mandatario se refirió a la economía del país suramericano, que según el informe publicado en noviembre por el Ministerio de Economía muestra un repunte en el segundo semestre del año «gracias a las medidas tomadas por el Gobierno».
«Nuestro Gobierno, tomando en cuenta otros países del mundo, fue el que mejor lo hizo o uno de los que mejor resultados económicos tuvieron», afirmó Bolsonaro.
El Producto Interno Bruto (PIB) de Brasil tuvo un contracción de -4,5 %, que es un 0,2 % menor que la prevista. La cartera de Economía espera que en 2021 repunte a 3,2 %.
Suben las muertes y los contagios
Aunque las cifras económicas oficiales se muestran favorables, la situación causada por el coronavirus se ha agravado en las últimas semanas.
En este escenario, que podría empeorar todavía más en enero, después de las fiestas navideñas, el número de contagios se ha incrementado a la par que ha disminuido el de camas disponibles en las Unidades de Cuidado Intensivo (UCI) del sistema de salud público.
Se prevé que este viernes las muertes sobrepasen la cifra de 180.000, puesto que la víspera fueron registrados 769 decesos y en total hay 179.801 fallecidos desde que comenzó la pandemia. Además, en el último informe ofrecido por las autoridades sanitarias, se informa de 53.359 nuevos casos de la enfermedad, elevando el número total a 6.783.477 personas contagiadas.
Según cálculos estadísticos, la media diaria es de más de 600 defunciones, lo que representa 35 % más que la cifra de las dos semanas anteriores. Esta tendencia al alza se ha visto en 21 de los 26 estados brasileños, recoge O Globo.
Otra situación que ha causado alarma es que en siete capitales del país la ocupación de las camas de cuidados intensivos ha llegado a 90 %, según los datos compilados por varios medios de comunicación.
Reacciones en las redes
La afirmación de Bolsonaro causó rechazo entre los usuarios de las redes sociales, que han cuestionado la veracidad de esa información a través de comentarios sarcásticos.
En una caricatura colgada por un internauta se ve al presidente brasileño diciendo «estamos viendo el final de la pandemia», mientras que a sus espaldas hay personas cargando ataúdes
En otro mensaje, una usuaria califica al mandatario de «negacionista peligroso» y advierte: «No oiga al presidente. Eso puede llevar a la muerte».
Un trino más dice que en Brasil aún no existe ningún plan de acción para vacunar a la población: «Van a sobrar cadáveres y faltar urnas. El proyecto bolsonarista de exterminio camina muy bien»
Si bien a Brasil llegó el primer lote de la vacuna china CoronaVac, que se encuentra en ensayos junto a otras cuatro, Bolsonaro se ha mostrado reticente a su aplicación en el país. Ante esta situación que los medios han llamado «la guerra de las vacunas», el gobernador de Sao Paulo, Joao Doria, ha dicho que la inmunización se iniciará en su estado en enero del próximo año.
RTNoticias.com