Es la quinta nave en lograr la hazaña sin problemas y la primera que tiene como objetivo responder a la pregunta de si hubo vida en el planeta rojo
La NASA logró este jueves posar sobre Marte a su vehículo de exploración Perseverance, que es la quinta nave en lograr la hazaña sin problemas y la primera que tiene como objetivo responder a la pregunta de si hubo vida en el planeta rojo.
«Se confirma que tocó tierra», dijo el jefe de misión Swati Mohan a las 15h55 hora del este de Estados Unidos (20H55 GMT) tras lo cual el cuartel de operaciones del Laboratorio de Naves a Propulsión estalló en aplausos.
La NASA publicó en la cuenta de Twitter de Perseverance una foto en blanco y negro tomada desde el dispositivo, que muestra la superficie granulosa del cráter de Jezero, en el hemisferio norte de Marte.
La misión fue una hazaña ya que la maniobra de descenso era muy arriesgada debido al relieve del cráter Jezero, donde la NASA buscó posicionar a la nave. Los científicos bautizaron el proceso como «los siete minutos del terror», por la incertidumbre vivida.
Después de entrar en la atmósfera de Marte a una velocidad de 20.000 km/h, la temperatura subió hasta los 1.300 Cº. El vehículo está protegido por un escudo térmico, que activó la apertura de un enorme paracaídas supersónico.
Entonces sus ocho motores lo ayudaron a frenar para poder desplegar sus seis ruedas y tocar la superficie.
En los próximos meses el vehículo intentará recolectar unas 30 rocas y muestras del suelo que serán enviadas de vuelta a la tierra en la década de 2030 para su análisis.
El sueño de un astrobiólogo
Los investigadores creen que el cráter Jezero albergaba un lago de unos 50 km de ancho desde hace más de 3.500 millones de años.
«La pregunta de si había vida más allá de la Tierra es unas de las preguntas más fundamentales y esenciales que nos podemos plantear», dijo la geóloga de la NASA Katie Stack Morgan.
«Nuestra habilidad de hacernos esta pregunta y desarrollar investigaciones científicas y de tecnología para resolverla, es una de las cosas que nos hace únicos como especie», agregó.
Perseverance se mueve a una velocidad máxima de 0,16 kilómetros por hora, lo que parece lento, pero supera a todos sus predecesores y mientras se desplaza analiza el suelo en busca de materia orgánica, hace un mapa de la composición química y estudia la presencia de vapor.
«Los astrobiólogos hemos soñado con esta misión durante décadas», indicó Mary Voytek, directora del programa de esta rama de la ciencia en la NASA.
Lograr llevar de vuelta las rocas a la tierra es crucial ya que un fósil puede tener una forma similar a la huella que deja la lluvia, por ejemplo.
Volar en otros mundos
Los primeros meses de la misión no se dedicarán a buscar vida, sino a experimentos paralelos.
La NASA quiere, en particular, demostrar que es posible volar un vehículo motorizado en otro planeta. El helicóptero, bautizado Ingenuity, intentará elevarse en aire con una densidad equivalente al 1% de la de la atmósfera terrestre.
Dos micrófonos tienen la función de grabar el sonido del planeta rojo.
La NASA también experimentará la producción de oxígeno en Marte. Un instrumento llamado Moxie, del tamaño de una batería de automóvil, debería poder producir hasta 10 g de oxígeno en una hora, succionando dióxido de carbono de la atmósfera, con un proceso similar al de una planta.
Este oxígeno podría ser utilizado para respirar por los humanos que vayan a Marte en el futuro, pero también como combustible.
Perseverance es el quinto vehículo en posarse en suelo marciano. Desde el primero, en 1997, todos han sido estadounidenses, y uno de ellos, Curiosity, sigue con su misión en el planeta.
China colocó recientemente en la órbita de Marte su sonda «Tianwen-1», que contiene un robot que se espera intente bajar en mayo.