El ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, rechazó este martes mediante videoconferencia la proliferación de armas nucleares de Estados Unidos en Europa e instó a las autoridades pertinentes a retirarlas inmediatamente.
Canciller ruso en el marco de una conferencia sobre el desarme nuclear expresó que: «Puedo asegurarles que Rusia, como miembro responsable de la comunidad internacional y comprometida con sus obligaciones en materia de no proliferación de armas de destrucción masiva, está tomando todas las medidas necesarias para evitar la aparición de armas nucleares y de tecnologías relacionadas en Ucrania».
A su vez, alertó sobre las posibilidades de que Kiev renuncie a su estatus no nuclear, lo cual atenta contra las garantías de seguridad, tanto de manera regional como global.
Lavrov instó a Occidente la disminución del flujo de armas con el fin de evitar eventos más violentos. En consonancia con ello, el diplomático aseguró que Moscú «no tenía ni tiene misiles terrestres» de mediano y corto alcance, como los que planea instalar la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) en Ucrania.
Al mismo tiempo, el canciller responsabilizó a Estados Unidos, la OTAN y la Unión Europea de la crisis en Ucrania al violar las garantías de seguridad exigidas por Rusia durante décadas.
En este sentido, acotó que la situación actual es el «resultado de la connivencia de los patrocinadores occidentales del régimen criminal» ucraniano.
El funcionario ruso recordó sus exigencias presentes en las recientes conversaciones. Entre ellas resaltan el mantenimiento de las fronteras de la OTAN en el este europeo, el retorno a sus capacidades militares de 1997 y la no utilización de las instalaciones militares de los países limítrofes con Rusia.
Las partes involucradas en la crisis en Ucrania parecen no converger en casi ningún punto de las negociaciones. Occidente irrespeta las garantías de seguridad rusas y aviva el conflicto mediante una carrera armamentística, que solo podría convenir al belicista complejo militar industrial.
El Nacional