Olivia Grace Floyd, de 7 años, estaba en casa de sus abuelos cuando fue atacada por el perro Rottweiler de la pareja. La niña murió por sus graves heridas y ahora sus abuelos enfrentan cargos de homicidio, reporta PEOPLE. La tragedia ocurrió el 29 de enero de este año en Virginia. Sus seres queridos describen a Olivia como una niña muy cariñosa que «amaba la vida».
Tras ser atacada por el perro de 4 años, la niña fue llevada en ambulancia al hospital, donde falleció. Otra mujer —cuya identidad no ha sido revelada— también resultó herida por el perro, pero recibió tratamiento médico y se recuperó.
Según la policía del condado de Waynesboro, Stephen Christopher Kachmar y Penny Lee Bashlor —los abuelos de Olivia— enfrentan cargos de asesinato y de abuso infantil.
Kachmar, de 60 años, y Bashlor, de 64, podrían ser condenados a hasta 70 años de prisión si son declarados culpables. Los abuelos están en la cárcel sin derecho a fianza.
Los padres de Olivia —Brooks Anthony Floyd y Alicia Rene Floyd— también enfrentan cargos de crueldad o lesión a un menor de edad, y de ser encontrados culpables podrían pasar hasta cinco años en prisión. El padre, de 39 años, está encarcelado, mientras que la madre salió libre tras pagar una fianza.
No se sabe si los familiares acusados ya tienen representación legal. Olivia era una estudiante de segundo grado, que era porrista, y que disfrutaba la danza y la gimnasia. Sus colores favoritos eran el rosado y el morado, y le encantaban los unicornios.
Una cuenta de GoFundMe fue creada por la familia para recaudar fondos para cubrir los gastos fúnebres de la niña. Que en paz descanse.
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