Un horneado exitoso requiere ser cuidadosos en varios aspectos y evitar así que nuestra preparación tenga la cocción, textura, sabor y color contrarios a lo que esperábamos, un fracaso.
1. Lee la receta por completo
No basta leer solo la lista de ingredientes, antes de decidir iniciar la preparación, lee el procedimiento de principio a fin. Hay recetas en las que la masa debe reposar o refrigerarse antes de continuar el proceso, así tendrás considerado ese tiempo y no iniciarás a cocinar a la media noche.
2. Pesa y mide
No vale añadir los ingredientes “al tanteo” a “ojo de buen cubero”, y menos en la repostería. Los ingredientes deben estar en las cantidades exactas. Menos o más harina, más levadura, más azúcar pueden y una temperatura inadecuada pueden dar origen a un decepcionante resultado. Panes que no levantaron, están masudos, secos o duros, galletas como panes o piedras, entre otros desastres.
Ten a la mano cucharas y tazas medidoras, una báscula si es posible. El peso en una taza de harina puede variar si está o no compactada. Antes de medir,rastrille la harina con un tenedor.
Para tener un mayor control del tiempo de horneado y evitar una mala cocción, no olvides tener el control de la temperatura, considera el precalentar el horno y comprobar la temperatura con un termómetro.
3. Cierne la harina
Los elementos secos harina, polvo de hornear, bicarbonato, deben cernirse y mezclarse antes de añadir al batido líquido.
4. Usa batidor en lugar de tenedor
El batidor a diferencia del tenedor genera más aire, creando una mejor textura y volumen.
5. Usa rodillo
Un rodillo te dará mayor control que una botella. Extenderás mejor tu masa y al no tocarla evitas la contaminación y el calentamiento de esta.
6. No ignores el término “temperatura ambiente”
Atienda siempre a las recomendaciones de mantequilla, huevos, leche u otro producto que la receta indica debe estar a temperatura ambiente. La temperatura de estos afecta la forma en la que se descompone. Bon appetit explica que si una mantequilla refrigerada no se batirá, lo que significa que no se volverá aireada y voluminosa, y el pastel no quedará bien. Los huevos fríos pueden hacer que la masa se cuaje y colapse.
Para ello recomienda cortar la mantequilla fría e cubos y acercarla al horno precalentado. No debe derretirse.
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7. Mezclar y batir no son lo mismo
Revolver: mezclar los ingredientes con cuchara o espátula.
Batir: mezclar usando una batidora eléctrica o un batidor manual para incorporar aire y suavizar grumos.
8. Papel pergamino para horneado
Usar un papel antiadherente y resistente al calor nos ayudará a separar nuestro pan del molde sin problemas después de hornear y enfriar.
9. Atiende el tiempo de horneado
No abrir con frecuencia el horno mientras la mezcla está dentro. Si el temporizador sonó, saca y verifica su cocción, hornea por unos minutos más si se requiere.
10. Espera a que enfríe
Ten paciencia para desmoldar, espera a que tu bizcocho se enfríe, así evitarás que se arruine.
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