La Organización Panamericana de la Salud (OPS) pidió este miércoles a los países de la región que «trabajen juntos para satisfacer la creciente demanda de vacunas, medicamentos y otros equipos médicos», en un contexto de subida de casos de COVID-19 y de viruela símica, o del mono.
La directora del organismo continental, Carissa F. Etienne, dijo este día durante una rueda de prensa que la aparición de los sublinajes de ómicron es «un recordatorio más de que el virus sigue evolucionando cada vez que se transmite, y de que debemos permanecer vigilantes».
«La capacidad de producción seguirá siendo muy necesaria en nuestra región para ayudar a hacer frente a la COVID-19 y a otros patógenos», consideró Etienne, de acuerdo con un comunicado de la OPS.
La funcionaria sostuvo que «es probable que se produzcan brotes de otras enfermedades que requerirán que desarrollemos y despleguemos rápidamente nuevas vacunas, diagnósticos y medicamentos para combatirlas».
La OPS advirtió en su comunicado que los sublinajes BA.4 y BA.5 de ómicron impulsan una nueva ola de infecciones por COVID-19 en las Américas, y los casos de viruela del mono siguen aumentando.
Etienne dijo que los países de la región deben «estar mejor preparados para el futuro» y anunció un plan en tres fases para trabajar con los países y los donantes internacionales para reforzar la capacidad regional de producir vacunas y dispositivos médicos.
La primera fase se centrará en fortalecer la investigación y el desarrollo en América Latina y el Caribe, en particular en el área de desarrollo de vacunas de ARN mensajero (ARNm) y la segunda fase en el desarrollo de un sistema de regulación regional para garantizar que las nuevas herramientas médicas sean seguras y eficaces.
Mientras que «para la tercera fase la OPS trabaja con socios regionales e internacionales en la creación de una hoja de ruta para mejorar la producción de tecnologías sanitarias en las Américas», indicó el organismo.
«Todos estos esfuerzos combinados tienen el potencial de transformar la manera en que la región desarrolla y elabora productos y tecnologías médicos, especialmente herramientas muy sofisticadas como las vacunas», sostuvo la directora de la OPS.
En cuanto a la situación de la COVID-19 en la región, los países informaron aproximadamente 1,6 millones de casos nuevos y 4.800 muertes la semana pasada, lo que supone un descenso del 0,9 por ciento y del 3,5 por ciento, respectivamente.
Xinhua