El fuego sigue arrasando miles de hectáreas en España en incendios forestales de punta a punta al país, que mantienen en vilo a poblaciones rurales mientras un importante dispositivo con apoyo del Ejército intenta sofocar las llamas, en medio de una ola de calor que mantiene el termómetro por encima de los 40 grados centímetros.
Algunos fuegos llevan días activos, como el que desde el pasado lunes ha quemado unas 9.000 hectáreas en Monsagro (noroeste), donde las condiciones meterológicas dificultan las tareas de extinción y en esta jornada el viento obligó a retirarse a los medios aéreos que lucha contra el incendio, según fuentes de los servicios de emergencias.
La región en la que se encuentra esta zona, Castilla y León, ha registrado 165 incendios en la última semana.
La proximidad de las llamas hace necesario desalojar localidades rurales en distintas partes del país, en casos como Candeda en la región de Galicia (noroeste), donde el fuego quemó algunas casas, además de arrasar unas 1.100 hectáreas.
La Unidad Militar de Emergencias colabora en los trabajos para sofocar varios fuegos en esta región, donde los incendios forestales suman 4.430 hectáreas quemadas en los últimos días.
En el otro extremo del país, en Cataluña (noreste) se vive una sitación similar en localidades como El Pont de Vilomara, donde el fuego calcinó al menos 440 hectáreas de bosque, incluido un parque natural, y obligó a evacuar casas más próximas a las llamas.
Los servicios de emergencias pidieron a los vecinos que se dirijan hacia el centro de los núcleos de población, con un «confinamiento general» para que no salgan de sus casas por la proximidad del incendio, con un centro de acogida habilitado para quienes tengan que ser evacuados.
Otros fuegos presentan una evolución algo mejor, como el de la sierra de Mijas en el sur de España, donde muchos de los 3.000 desalojados pudieron volver a sus casas aunque siguen habilitados dos pabellones deportivos como albergues con apoyo de Cruz Roja.
HORAS CRÍTICAS
No obstante, las autoridades piden prudencia, porque los efectivos contraincendios afrontan las horas «más críticas» por la subida de las temperaturas, en esta zona en la que el fuego ha recorrido un perímetro de 1.890 hectáreas desde el pasado viernes.
Los responsables de la lucha contra el fuego denuncian que algunos de estos incendios son provocados, como el declarado la pasada noche en la Garganta de los Infiernos (este).
Solo en la región de Extramadura, donde se encuentra este paraje natural, en fuego ha quemado unas 6.000 hectáreas en los últimos días, en zonas como la del Parque Nacional de Monfragüe, uno de los principales espacios naturales en España.
Más de setecientos vecinos fueron evacuados de diez núcleos de población y algunos llevan siete días fuera de sus casas.
El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, tiene previsto viajar este lunes a Extremadura para visitar zonas afectadas y comprobar sobre el terreno los trabajos de extinción.
La ola de calor que sufre casi todo el país tras la entrada de una masa de aire cálido del Sáhara deja en su octavo día máximas superiores a los 40 grados en diversos puntos de España.
El fenómeno ha puesto este domingo a tres regiones del norte del país en alerta roja por «riesgo extremo» de calor y a otras diez en aviso por «riesgo importante».
Este fin de semana las temperaturas en casi todo el país han rondado los 40 grados y para este domingo la Agencia Estatal de Meteorología pronosticaba que se llegue a los 43 en puntos de Extremadura.
Según avanzó a EFE esta entidad, los especialistas prevén que la ola de calor tenga un breve alivio durante el martes, si bien es probable que el miércoles arranque una nueva subida en las temperaturas, con la potencial continuación de este episodio que ya se considera «largo».
EFE
