La política de intervención cambiaria del Banco Central de Venezuela (BCV) sigue teniendo limitaciones. A pesar del aumento en el ingreso de divisas al país, por el repunte de los precios del petróleo, las reservas internacionales no se dan abasto para mantener a raya el tipo de cambio.
De acuerdo a la consultora Síntesis Financiera, el BCV disminuyó considerablemente su venta de divisas a las mesas de cambio de la banca, al pasar de 100 millones de dólares semanales a 60 millones de dólares pero, además, la entrega de las divisas la fraccionó en dos partes.
Los datos de la consultora señalan que el lunes 1 de agosto, el Banco Central asignó poco más de 45 millones de dólares y complementó el miércoles 3 con 15 millones de dolares, logrando pequeños retrocesos en el tipo de cambio en esos dos días de 0,3% y 0,1%, respectivamente.
A pesar de que el precio de la divisa ha tenido un menor ritmo de crecimiento desde el pasado año, debido a la política monetaria implantada por el ente emisor de restringir la liquidez, su cotización en el sistema cambiario llegó al tope de los 6 bolívares. Mientras que aunque la tasa de cambio del BCV no ha llegado a este techo, siempre le sigue los pasos.
La medida radica en que el organismo inyecta divisas y retira los bolívares necesarios a las entidades bancarias, para mantener la meta de tipo de cambio definido.
Tal Cual