El primer ministro de Haití, Ariel Henry, indicó que habrá un próximo aumento de los precios de los combustibles, en medio de protestas por la grave crisis política y social que afecta el empobrecido país caribeño.
«Tendremos que ajustar el precio del combustible», destacó el mandatario.
«La solución a los problemas del país no pasa por las barricadas en llamas, los desórdenes, la destrucción de los cristales de los coches o la destrucción de los bienes de la gente», dijo Henry en su discurso, en el que advirtió de que la justicia perseguirá a todos aquellos que cometan actos irreparables.
El Estado destina más de 50.000 millones de gourdes (427 millones de dólares) en la subvención del combustible «para las personas capaces de pagarlo al precio normal», señaló.