Las Defensorías del Pueblo de Colombia y Panamá dieron a conocer sobre la construcción de una “alerta temprana binacional”, con el fin de reducir los peligros para los migrantes y refugiados que atraviesan la selva del Darién para seguir la ruta hacia Estados Unidos.
El Defensor del pueblo colombiano, Carlos Camargo, y su homólogo panameño, Eduardo Leblanc, se reunieron el sábado 23 en Medellín, para hacer seguimiento a la crisis migratoria en la zona del Urabá-Darién, debido a las graves violaciones a los derechos humanos que se han registrado.
“Aprovechando la reactivación de las relaciones con el hermano país de Venezuela, desde la Defensoría del Pueblo consideramos que esta crisis migratoria por el Urabá-Darién debe ser un tema prioritario en la agenda humanitaria, dado que el 69% de los migrantes que hoy están pasando por el Darién son venezolanos, y el 15% son menores de edad”, dijo Camargo.
Lo más reciente fue el asesinato de un niño venezolano de 6 años de edad, luego de que el grupo donde iba fuese atacado por grupos armados que pretendían asaltarlos. En el hecho también fueron heridos dos adultos. “El Tapón del Darién es una trampa mortal”, afirmaron los funcionarios.
“Ha pasado un año desde cuando alertamos sobre la situación humanitaria en el Darién por el paso masivo de ciudadanos haitianos. Hoy estamos asistiendo a una crisis humanitaria de dimensiones más graves, en su mayoría de migrantes venezolanos quienes viajan en condiciones de precariedad económica y de mayor vulnerabilidad”, dijo el Defensor del Pueblo de Colombia.
Hasta la fecha han cruzado 134 mil migrantes por la selva del Darién con rumbo hacia Panamá. Esta cifra supera la registrada durante todo el 2021, mientras que las autoridades prevén un incremento en el número de personas en tránsito hacia el norte del continente.
Ambos defensores solicitaron, tanto al Ministro de Defensa de Colombia como al Servicio Nacional de Fronteras de Panamá, que aseguren la mayor parte del Golfo Urabá y de Darién, respectivamente, “para evitar los asaltos que se están dando dentro de las fronteras, vulnerando los derechos de los migrantes”.
Agencias