Las fuerzas rusas han atacado con «drones kamikaze» de fabricación iraní la ciudad de Bila Tserkva, situada unos 80 kilómetros al sur de la capital ucraniana.
Según el informe del jefe de la Administración Militar Regional de Kiev, Oleksiy Kuleba, recogido por la agencia Ukrinform, al menos una persona resultó herida por los impactos de estos drones del tipo Shahed-136, que descargaron anoche su munición en seis oleadas.
Las explosiones provocaron también varios incendios, que ya están siendo sofocados, y algunas infraestructuras de la ciudad que Kuleba no ha especificado.
Un nuevo desafío para Ucrania
La defensa ucraniana se había mostrado capaz de derribar hasta el 75 % de los misiles rusos y de mantener alejada a la aviación invasora, pero la aparición de estos «drones kamikazes», de los que Rusia supuestamente ha adquirido varios centenares a Irán, ha supuesto un nuevo desafío para las fuerzas militares de Ucrania.
Bila Tserkva, una ciudad de unos 200.000 habitantes, se encuentra en el sur de la provincia de Kiev, una zona que había quedado lejos de los focos de la ofensiva militar rusa, centrada en las última semanas sobre todo en el sur y sureste del país.
En su mensaje, Kuleba ha pedido a los residentes de la región de Kiev que no ignoren las alertas de ataques aéreos y sigan las instrucciones de los cuerpos de seguridad.
EFE
