Uno de los aludes de tierra provocados por las intensas lluvias en el norte de Santander, Colombia, dejó hasta este martes cinco personas de un mismo núcleo familiar desaparecidas en la localidad de Villa Caro, reportó Telesur.
Los organismos de rescate no han logrado mayores avances debido a que el alud se mantiene activo, informaron las autoridades locales.
De igual forma reportaron que 150 personas fueron evacuadas y están recibiendo ayuda y asistencia en una institución escolar del municipio.
Las autoridades locales han confirmado que en el norte de Santander hay 8.132 familias damnificadas por las intensas lluvias de la temporada invernal en Colombia.
Entretanto, la vía Cúcuta-Pamplona que estaba cerrada por varios derrumbes ya fue habilitada luego de permanecer por dos días cerrada.
En ese sentido, las autoridades mantienen un monitoreo permanente a las emergencias que dejan como los municipios más afectados a Villa Caro, Pamplona, Cúcuta, Tibú, Convención, Hacarí y Ocaña.
Capital de Colombia declara calamidad pública
La alcaldesa de la capital colombiana, Claudia López, declaró el domingo la calamidad pública debido a las fuertes lluvias que este fin de semana dejaron al menos dos personas muertas y una desaparecida, reportó Telesur.
López agregó que las labores iniciadas el pasado domingo han permitido «empezar a remover escombros» y se habilitaron «tres albergues» para 46 familias afectadas por las lluvias.
Por otra parte, la Alcaldía de La Calera también había declarado la calamidad pública para ejecutar las acciones de remoción de lodo y escombros frente a las afectaciones y daños causados por las lluvias.
La temporada invernal en Colombia, agravada por el fenómeno de La Niña, sigue provocando estragos a lo largo y ancho del país.
La temporada de lluvias ha dejado en lo que va de año 205 muertos, de acuerdo con la información consolidada por la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD).
A esa cifra se suman 281 heridos, 53 desaparecidos y cerca de medio millón de personas afectadas, así como 5.858 viviendas destruidas y 77.816 casas afectadas. Las muertes superan por mucho las de años recientes.
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