Los diálogos entre el gobierno y la oposición de Venezuela iniciarían este fin de semana en México, según fuentes.
Este proceso viene desarrollándose desde hace unas semanas, cuando ambos sectores se vieron las caras en París durante el Foro de la Paz.
Estas conversaciones están paralizadas desde hace un año debido al encarcelamiento del colombiano Álex Saab, preso en Estados Unidos y considerado testaferro de Nicolás Maduro.
El gobierno venezolano espera que con estos diálogos se levanten las sanciones estadounidenses contra los funcionarios chavistas, quienes también piden el regreso de las empresas petroleras.
Las conversaciones incluirán condiciones para las elecciones presidenciales de Venezuela de 2024 y podrían desbloquear US$2.700 millones de fondos gubernamentales actualmente congelados por las sanciones, dijeron.
El anuncio oficial podría emitirse a partir del miércoles por parte del mediador Noruega, mismo que será reforzado por las delegaciones venezolanas, dijeron las personas.
El presidente colombiano, Gustavo Petro, escribió este miércoles en su cuenta de Twitter: «Este 25 y 26 de Noviembre se reinician los diálogos entre el gobierno de Maduro y la oposición venezolana».
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Noruega declinó hacer comentarios sobre los detalles de las negociaciones. Ni el Gobierno ni los portavoces de la oposición respondieron de inmediato a los mensajes en busca de comentarios.
Se prevé que las dos partes abran las reuniones mediante la firma de un acuerdo que desbloquearia US$2.700 millones de fondos gubernamentales actualmente congelados en cuentas internacionales que se utilizarían para reconstruir redes eléctricas y financiar proyectos de salud, entre otras iniciativas, según personas familiarizadas con la situación.
La ONU supervisaría el trabajo y administraría la cuenta, dijeron las personas. En repetidas ocasiones, el Gobierno del presidente de EE. UU., Joe Biden, ha dicho que reevaluaría su política de sanciones si el Gobierno de Maduro hiciera concesiones políticas, comenzando con el reinicio de las conversaciones en México.
El primer paso podría ser una licencia limitada para Chevron Corp., eso aflojaría algunas restricciones financieras sobre las operaciones en Venezuela del perforador con sede en California.
La flexibilización de las restricciones económicas internacionales podría ayudar al país a comenzar a bombear más petróleo. A pesar de contar con las reservas de crudo más grandes del mundo, la industria petrolera de Venezuela ha sido destruida tras años de mala gestión, falta de inversión y sanciones, que prohíben las actividades financieras de las empresas estadounidenses en el país.
Con información de www.eltiempo.com