El sociólogo, Franco Vielma, explicó que la licencia 41 permitirá algunas liberaciones de las restricciones para las operaciones en Venezuela.
«Puede comprar petróleo en Venezuela y puede también comprar dentro de las empresas mixtas que ellos tienen con PDVSA insumos para la producción y bombeo de crudo desde Venezuela, para luego comercializarlo ese petróleo en el mercado estadounidense (…) Lo que no puede hacer es pagar impuestos y regalías al gobierno venezolano», dijo.
Dijo que las limitaciones descritas en el permiso del Departamento del Tesoro son una maniobra narrativa que no es nueva, ya que desde el 2006, son las empresas mixtas las responsables de responder por las regalías de la industria.
Destacó que aún se están claras las condiciones que regirán las operaciones de la petrolera, hasta que el gobierno venezolano fije una posición ante la norma.
Durante los seis meses en que esté vigente la licencia, se evaluarán los próximos cambios aplicados en el régimen sancionatorio que pesa sobre el crudo criollo, opinó.
«Es la crisis energética la que trajo a Estados Unidos a este punto y obviamente Venezuela tiene que usar su posición, con la pelota en su campo de juego (…) Es una situación que Venezuela tiene que analizar para revisar en que condiciones puede aprovechar la oportunidad de la necesidad de los países», expresó
Aclaró que esta licencia abre la posibilidad para que las empresas estadounidenses y europeas puedan realizar operaciones en Venezuela, pero la administración Biden no está interesada en desbloquear las operaciones de India, China y Rusia. Unión Radio
