Los gobiernos de Ecuador y Perú declararon el miércoles una emergencia zoosanitaria por brotes de influenza aviar altamente patógenos en aves domésticas y sacrificarán a los ejemplares que se encuentran en los focos del mismo.
Ecuador sacrificará unas 180.000 aves para evitar la propagación del virus, dijo el miércoles el Ministerio de Agricultura.
«Durante los siguientes 90 días no se podrá movilizar aves, productos y subproductos de origen aviar como huevos, gallinas, pollos, entre otros, de las granjas afectadas por el brote», dijo el ministerio en un comunicado.
«Como parte del protocolo de seguridad se sacrificarán a las aves que están en el foco detectado; son aproximadamente 180.000 aves», añadió.
Por su parte Perú señaló que llevará a cabo esas mismas acciones, pero no especificó en el comunicado del Servicio Nacional de Sanidad Agraria el número de aves que serán sacrificadas por encontrarse en el foco detectado.
Dentro de sus medidas, las autoridades sanitarias peruanas ordenaron que las aves sacrificadas sean enterradas con un mínimo de dos metros de profundidad.
Doris Rodríguez, funcionaria del estatal Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre de Perú, afirmó a la radio local RPP que unas 13.800 aves han muerto por la gripe aviar, entre ellas unos 10.000 pelícanos principalmente en el norte y centro del país.
El primer caso del brote de influenza aviar H5 en Ecuador fue detectado en una granja avícola en la provincia andina de Cotopaxi, al sur de Quito, por lo que las autoridades levantaron el fin de semana un cerco epidemiológico y activaron una cuarentena interna en las posibles zonas contagiadas.
La enfermedad, comúnmente llamada gripe aviar, a menudo es transmitida por aves silvestres que luego pueden transmitir el virus a las aves de corral.
Las autoridades dijeron que en el foco detectado está el 0,15% de la población avícola del país, que cuenta con unos 263 millones de pollos y 16 millones de aves ponedoras, según datos oficiales.
El ministerio ecuatoriano informó que están llevando a cabo monitoreos y controles con unos 850 técnicos en otras granjas avícolas, a fin de descartar la presencia de influenza en otras provincias.
El sector avícola del país tiene 1.810 granjas y genera US$1.800 millones, lo que representa el 23% del Producto Interno Bruto (PIB) agropecuario de la nación sudamericana.
El ministerio de Agricultura aseguró que la influenza aviar no constituye un riesgo para la salud de la población, por lo que garantizó el consumo de huevos y carne de pollo.
NP/Unión Radio