El hospital infantil londinense de Great Ormond Street, realizó un tratamiento pionero que logró tratar un cáncer incurable de una niña de 13 años.
Alyssa fue diagnosticada en mayo de 2021 con una leucemia linfoblástica aguda de células T.
Asimismo, la niña se sometió sin éxito a quimioterapia y un trasplante de médula ósea.
Así lo informó en un comunicado el Great Ormond Street Hospital for Children (GOSH, en inglés).
La paciente ya recibía solo cuidados paliativos en el mes de mayo del presente 2022.
Sin embargo, decidió participar en un ensayo clínico con la nueva técnica de «edición de bases» de células T con receptores quiméricos de antígenos (CAR-T).
Este servicio se ofreció en la Unidad de Trasplante de Médula Ósea del centro médico.
Así, la niña recibió células CAR-T, procedentes originalmente de donantes sanos.
A diferencia de los tratamientos habituales, estas células se modificaron genéticamente para tratar su tipo de cáncer.
Los médicos del GOSH precisan que, hasta ahora, había sido difícil tratar la leucemia de células T con la terapia ya conocida de CAR-T.
Las células T que se diseñan para reconocer y atacar a las células T cancerosas, acaban también eliminándose entre sí en el propio proceso de fabricación.
Los equipos del GOSH diseñaron un nuevo tipo de tratamiento de células T con CAR, que pudieran atacar con eficacia a las células T cancerosas.
Los expertos explican que la técnica de la «edición de bases» permite cambiar las células T mediante la conversión química de letras individuales del código de ADN.
Con esta edición genómica, el equipo realizó múltiples cambios en las células T de los donantes sanos.
Esto de modo que no fueran atacadas por el propio sistema inmunitario del paciente.
También se aseguraron de que las células T modificadas no se atacaran entre sí y de que fueran «invisibles» a otros tratamientos de cáncer.
Asimismo, se añadió una vía para que las células modificadas reconocieran y atacaran a las células T cancerosas, apunta el comunicado.
Gracias a la ingeniería biológica, los médicos crearon lo que puede considerarse «un medicamento vivo»
A los 28 días de tratamiento, la leucemia ya entró en remisión y Alyssa recibió un segundo trasplante de médula para restaurar su agotado sistema inmune.
Ahora, seis meses después, continúa la recuperación en su casa del centro de Inglaterra.
También la niña debe someterse a controles periódicos para comprobar que el cáncer no regrese.
Agencia EFE