La ola de calor extremo a la que se enfrenta el oeste de Canadá está provocando el rápido aumento de los incendios forestales en las provincias de Columbia Británica y Alberta, que este lunes sumaban 440 incendios activos.
Miles de personas han sido evacuadas, o están bajo la alerta de evacuación, en el centro de Columbia Británica, provincia que tiene 280 incendios forestales activos.
Las llamas están a unos 5 kilómetros la histórica localidad de Barkerville, la reliquia más antigua del oeste de Norteamérica de la fiebre del oro que atrajo a miles de personas en la segunda mitad del siglo XIX, lo que ha obligado a la evacuación de su población.
Unos 300 kilómetros al sur, las llamas han cortado la autopista Trans-Canada que recorre de este a oeste el país.
En la vecina provincia de Alberta, este lunes había 160 incendios forestales activos, según las últimas cifras oficiales.
Mientras, en el este del país, las autoridades autorizaron este lunes el regreso a sus hogares de los alrededor de 7.000 habitantes de la población de Labrador City, que habían sido evacuados el 12 de julio cuando un incendio forestal se acercó peligrosamente a la localidad.
La alcaldesa de Labrador City, Belinda Adams, anunció la medida en a través de Facebook y señaló que el incendio, que en hace 10 días había pasado de 6 a 140 kilómetros cuadrados en pocas horas con la ayuda de las condiciones meteorológicas, ya no era una amenaza.
Con información DW en Español
