En la oscuridad total de las profundidades del Océano Pacífico, los científicos han descubierto oxígeno producido no por organismos vivos sino por extraños grumos metálicos con forma de patata, que emiten casi tanta electricidad como las pilas AA.
El sorprendente hallazgo tiene muchas implicaciones potenciales y podría incluso obligar a replantearse cómo empezó la vida en la Tierra, según afirmaron el lunes, 22 de julio, los investigadores de un nuevo estudio.
Se creía que sólo los seres vivos como las plantas y las algas, eran capaces de producir oxígeno mediante la fotosíntesis, que requiere luz solar.
Sin embargo, cuatro kilómetros por debajo de la superficie del Océano Pacífico, donde no llega la luz solar, se han encontrado por primera vez pequeños depósitos minerales llamados nódulos polimetálicos, que producen el llamado oxígeno oscuro.
El descubrimiento se produjo en la Zona Clarion-Clipperton (CCZ), una llanura abisal que se extiende entre Hawai y México, donde las empresas mineras tienen planes para empezar a extraer los nódulos.
Los nódulos grumosos —a menudo denominados «baterías en una roca»— son ricos en metales como cobalto, níquel, cobre y manganeso, todos ellos utilizados en baterías, teléfonos inteligentes, turbinas eólicas y paneles solares.
El equipo internacional de científicos envió una pequeña embarcación al fondo de la ZCC con el objetivo de averiguar cómo podría afectar la minería a los extraños y poco comprendidos animales que viven donde no llega la luz.
Sin luz solar
«Intentábamos medir la tasa de consumo de oxígeno del fondo marino», explica a AFP Andrew Sweetman, autor principal del estudio y miembro de la Asociación Escocesa de Ciencias Marinas (Sams).
Para ello, utilizaron un artilugio llamado cámara bentónica que recoge un montón de sedimentos.
Normalmente, la cantidad de oxígeno atrapado en la cámara «disminuye a medida que es consumido por los organismos al respirar», explicó Sweetman.
Sin embargo, esta vez ocurrió lo contrario: la cantidad de oxígeno aumentó. Se suponía que esto no podía ocurrir en la oscuridad total, donde no hay fotosíntesis.
Fue tan sorprendente que los investigadores pensaron que sus sensores submarinos no funcionaban.
Así que subieron algunos nódulos a su barco para repetir la prueba. Una vez más, la cantidad de oxígeno aumentó.
Entonces se dieron cuenta de que los nódulos presentaban un sorprendente cambio eléctrico.
En la superficie de los nódulos, el equipo «sorprendentemente encontró voltajes casi tan altos como los de una pila AA», dijo Sweetman.
Según los investigadores, esta carga podría dividir el agua de mar en hidrógeno y oxígeno en un proceso denominado electrólisis del agua de mar.
Esta reacción química se produce a 1,5 voltios, aproximadamente la carga de una pila AA.
Emocionante
El director de Sams, Nicholas Owens, afirmó:
«Es uno de los hallazgos más emocionantes de los últimos tiempos en la ciencia oceánica»
El descubrimiento de oxígeno, producido al margen de la fotosíntesis, «nos obliga a replantearnos cómo pudo originarse la evolución de la vida compleja en el planeta», afirmó en un comunicado y añadió:
«La opinión convencional es que el oxígeno fue producido por primera vez hace unos tres mil millones de años por unos antiguos microbios llamados cianobacterias y que, a partir de entonces, se produjo un desarrollo gradual de la vida compleja».
No obstante, el descubrimiento del equipo demostró que «la vida podría haber empezado en otro lugar distinto de la tierra», dijo Sweetman.
«Y, si el proceso está ocurriendo en nuestro planeta, ¿podría estar ayudando a generar hábitats oxigenados en otros mundos oceánicos como Encélado y Europa y proporcionando la oportunidad de que exista vida?». se pregunta Sweetman.
El estudio se publicó en la revista Nature Geoscience.
El trabajo fue financiado en parte por la empresa canadiense The Metals Company, que pretende empezar a extraer los nódulos de la ZCC el año que viene.
Con información de agencias.