Ejercitar los pies es importante para tener buena movilidad y equilibrio, con entrenamiento es posible construir una fortaleza física que se sostenga en el tiempo y esto significa ejercitar todas las partes del cuerpo: las piernas, los brazos y el tronco.
Los pies son responsables de la movilidad y el equilibrio, y tener unos pies fuertes con dedos ágiles es importante, tanto para la salud como para la condición física, explicó la fundadora del sitio educativo Gait Happens, Courtney Conley.
La gente se entera del concepto de fortalecimiento del pie después de una lesión, dijo. Incorporar ejercicios para los pies y los dedos a la rutina, mucho antes de desarrollar dolor en las espinillas o fascitis plantar, puede ayudar a prevenir esas lesiones y mejorar la forma de caminar, sobre todo a medida que envejecemos. “La debilidad de los dedos de los pies es el principal factor predictivo de las caídas, cuando nos hacemos mayores”, dijo Conley.
Por otro lado, según el podólogo de la Clínica Mayo, en Rochester, Minnesota, Martin Ellman, el simple hecho de caminar hace que los pies se ejerciten. Cada vez que se está de pie o se camina, se pone en funcionamiento el núcleo del pie, una red de pequeños músculos que crean equilibrio y estabilidad.
El pie debe actuar como un trípode, explicó Conley. Al estar de pie, el peso debe distribuirse entre el talón y la base de los dedos gordo y meñique, con los dedos separados para crear una base sólida. Sin embargo, el calzado inadecuado suele acalambrar los dedos y endurecer la parte media del pie, explicó Jim Dooner, fisioterapeuta de Foot Collective, una empresa australiana dedicada al cuidado de los pies. “Las articulaciones que no pueden moverse en toda su amplitud, se endurecen y debilitan con el tiempo. El efecto es casi el de un yeso.
Si los músculos del pie o de la parte inferior de la pierna se debilitan y desequilibran, puede producirse una reacción en cadena de problemas en pies, tobillos, rodillas, caderas y zona lumbar. Las deformidades, como los juanetes, también pueden ser señales de que los músculos del pie necesitan atención, agregó Ellman.
Ante la explicación los expertos coinciden en que mejorar la salud de los pies no tiene por qué llevar mucho tiempo, pero es importante para mantenerse en forma a largo plazo, sobre todo a medida del envejecimiento.