La prevención es fundamental en la lucha contra el cáncer de cabeza y cuello, así que mantener los hábitos de vida saludables son sumamente importantes entre ellos: evitar el tabaco y el consumo excesivo de alcohol, al igual que llevar una dieta equilibrada y realizar los chequeos regulares con especialistas puede ayudar a prevenir la enfermedad o detectarla en etapas tempranas.
En el Día Mundial contra el cáncer de Cabeza y Cuello, se señalan estas prevenciones que buscan las posibilidades de un tratamiento efectivo y una recuperación exitosa, a su vez, la concientización a la población.
La enfermedad afecta la garganta, la boca, la nariz, la laringe y otros órganos de esta región. Se origina en las células que revisten las superficies mucosas de la cabeza y el cuello, a su vez se puede manifestar en diferentes formas.
Los factores de riesgo como el tabaquismo, el consumo de alcohol, la exposición a ciertos virus y bacterias, así como una dieta pobre en frutas y verduras, pueden aumentar la probabilidad de padecer esta enfermedad.
En caso de padecer este tipo de cáncer, el tratamiento dependerá del tipo de la enfermedad, pudiendo incluir cirugía, radioterapia, quimioterapia o una combinación de estas opciones, por eso de contar con un equipo médico que brinde un tratamiento personalizado y acompañamiento emocional durante todo el proceso.
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