En Venezuela hay al menos siete derrames de petróleo al mes, según estimaciones de la organización no gubernamental Clima21. Alejandro Álvarez, coordinador general de la ONG, cree que esta cifra debe ser mayor debido a la falta de reportes oficiales.
Con la opacidad gubernamental, se desconocen el origen, las causas, las afectaciones y cualquier otra información relacionada con los vertidos de crudo.
«Sin información adecuada y precisa, no podemos entender lo que está ocurriendo. No podemos prepararnos para cualquier situación y, por lo tanto, vemos cómo los daños tienden a multiplicarse», dijo Álvarez a Radio Fe y Alegría.
Destacó que la situación en el estado Zulia ha empeorado en los últimos años, especialmente en el lago de Maracaibo, y los graves efectos que ha tenido en los ecosistemas y poblaciones de los municipios costeros y no costeros cercanos.
«No solamente se afecta el ambiente, sino que se afecta a todas esas personas», advirtió.
El coordinador de Clima21 puntualizó el caso de la localidad de Bachaquero, donde asegura hay gran concentración de instalaciones petroleras que, por la falta de mantenimiento, ha habido constantes derrames de petróleo.
El ambientalista dijo que las autoridades no deben esperar a que ocurra este tipo de contingencias para tomar acciones, por lo que recomendó tener planificaciones anticipadas, como el diseño y el mantenimiento de las instalaciones, y actuaciones preventivas.
Manifestó asimismo la importancia de la voluntad política por parte de las autoridades, aunque también enfatizó la participación de los ciudadanos en la detención temprana de derrames.
Con información de EN.