Al recorrer las comunidades para conocer sus problemáticas, encontramos una gran fuga de agua potable en la calle Junín del sector Amores y Amoríos, perteneciente a la parroquia Catedral.
La señora Eneida Díaz, una de las personas más afectadas en la comunidad, vive frente a la fuga. «Mandé a revisar pensando que era la tubería normal, pero resultó ser la tubería principal, por lo que no se ha podido solucionar», explicó.
Comentó que al excavar se determinó que la fuga proviene de la tubería principal, un problema que ni ella ni los vecinos pueden resolver sin equipos especializados, tanto humanos como técnicos, para la revisión y corrección de la gran fuga de agua.
Hizo un llamado a Hidrobolívar y a los entes gubernamentales para que se acerquen a la zona, donde se están perdiendo miles de litros de agua, mientras en otros sectores cercanos falta el vital líquido.
Redacción