Joe Jonas es el último artista en eliminar parte una letra que hace referencia al desacreditado magnate de Bad Boy Music, Sean “Diddy” Combs, en medio del escándalo de abuso sexual de este último. Videos tomados por fans en un concierto de los Jonas Brothers en el LDLC Arena en Lyon, Francia, el sábado pasado parecían mostrar a Jonas omitiendo el nombre de Combs de su éxito de 2015 con la banda DNCE, “Cake By the Ocean”.
La letra original decía: “Walk for me, baby/ I’ll be Diddy, you’ll be Naomi, woah-oh” (Camina para mí, cariño/ Yo seré Diddy, tú serás Naomi, woah-oh). Pero en los clips del fin de semana, Jonas pareció omitir el nombre de Diddy y solo mencionar a la supermodelo Naomi Campbell. Este es el último ejemplo de un músico que elimina una referencia lírica a Combs, siguiendo los pasos de Kesha, quien retiró parte clave de la letra de su canción de 2009 “Tik Tok” a principios de este año.
Después de modificar la letra durante una participación en la presentación de Reneé Rapp en el festival de Coachella en abril para proclamar “f–k P. Diddy“, Kesha anunció en mayo que en adelante interpretaría únicamente la nueva letra a la luz de las horribles acusaciones contra Combs, que han llevado al exitoso magnate de la música y la moda a prisión bajo cargos de conspiración para extorsionar, tráfico sexual por la fuerza, fraude, coerción y transporte para participar en prostitución.
En su canción original, Kesha cantaba “Wake up in the morning feeling like P. Diddy” (Me levanto por la mañana sintiéndome como P. Diddy). Al preguntarle en mayo TMZ si el cambio era permanente, Kesha dijo: “Sí, lo será. Los fans deberían aprenderlo para mis próximos [shows]. Quiero escucharlo más fuerte que nunca. Me mantengo firme en eso”.
A Combs se ha negado la fianza dos veces en el caso, dejándolo tras las rejas hasta el inicio de su juicio por cargos que podrían llevar al alguna vez formidable astro de 54 años a la cárcel por el resto de su vida. Combs ha rechazado todos los cargos.
Esta misma semana, un abogado de Houston amenazó con presentar demandas civiles por abuso sexual en nombre de más de 120 personas que alegan abusos que se remontaban a 1991, incluidas 25 que supuestamente involucran a menores que afirman haber sido agredidos por Combs. El abogado Tony Buzbee dijo que más de 3.000 personas se han puesto en contacto con su oficina hasta ahora, y que planea comenzar a presentar los casos a lo largo del mes.
La abogada de Combs, Erica Wolff, negó rotundamente las acusaciones de Buzbee y dijo: “Como ha enfatizado el equipo legal del Sr. Combs, éste no puede abordar todas las acusaciones sin fundamento en lo que se ha convertido en un circo mediático imprudente. Dicho esto, el Sr. Combs niega enfática y categóricamente como falsa y difamatoria cualquier afirmación de que abusó sexualmente de cualquier persona, incluyendo menores. Espera demostrar su inocencia y reivindicarse en los tribunales, donde la verdad se establecerá sobre la base de pruebas, no de especulaciones”.
Combs, que alguna vez fue una de las figuras más poderosas e influyentes de la música, fue acusado por fiscales federales el mes pasado de múltiples cargos que alegan que fue el cerebro de una operación criminal masiva durante décadas destinada a satisfacer su necesidad de “gratificación sexual”. Hasta la fecha, 12 víctimas han presentado casos civiles de abuso sexual contra Combs durante el pasado año.
“Durante décadas, Sean Combs… abusó, amenazó y coaccionó a mujeres y otras personas a su alrededor para satisfacer sus deseos sexuales, proteger su reputación y ocultar su conducta”, escribieron los fiscales en la acusación. “Para hacerlo, Combs confió en los empleados, recursos y la influencia de su imperio empresarial multifacético que dirigió y controló”.
La semana pasada, Combs recibió otra demanda civil que alega que drogó y agredió sexualmente en repetidas ocasiones a una modelo no identificada durante un período de cuatro años, desde el 2020 hasta principios de este año. Los detalles en esa demanda coinciden estrechamente con las acusaciones hechas por los fiscales federales en su amplia imputación, que incluye detalles de actos sexuales “elaborados y producidos” alimentados por drogas entre las víctimas y trabajadores sexuales masculinos.
Con información de Billboard.
